• Reyes Ruiz Peña
Estamos apenas a un mes y dias de que termine el gobierno de Santacruz Carreño al frente de la alcaldía de Apizaco...

¡DIGÁMOSLE NÓ A LA CONTINUIDAD!

Estimado lector, considero pertinente aclarar que este espacio de opinión no está concebido con la finalidad exclusiva de hacer una crítica constante y sin fundamento al gobierno municipal de Apizaco, y al de nuestro estado. Mi pretensión es que sólo sea una ventana de expresión ciudadana donde demos a conocer diversas opiniones en relación con la problemática derivada de un gobierno encabezado por una persona que llegó a él con el objetivo de aprovecharlo para seguir medrando en la política.
 
Además, amigo conciudadano, esta columna también fue pensada para controvertir con esa prensa, falta de ética y responsabilidad, que está al servicio del gobierno, y evita hablar con la verdad respecto de situaciones que causan agravio y mortificación a la sociedad.

O, dígame usted, ciudadano apizaquense: ¿acaso ha leído o escuchado alguna crítica o alguna denuncia en relación con la pésima administración municipal que padecemos? Lo que sí ya estamos acostumbrados a  escuchar todos los días son las quejas que la gente expresa, de boca en boca, respecto de las autoridades, a causa, claro, del lamentable estado en el que se encuentra nuestro municipio.
 
Es verdad que existen algunos espacios en la radiodifusora local que son utilizados para dar a conocer puntos de vista y opiniones de la ciudadanía alrededor de temas relacionados con nuestra entidad. Sin embargo, pocos se atreven a tocar de manera clara y precisa asuntos que son de verdadero interés para las mayorías, desaprovechando la oportunidad de ser portavoz de una sociedad que busca ser oída -pero sobretodo atendida- por quienes tienen la obligación de hacerlo desde cualquier ámbito de gobierno.

Tal es el caso de un programa en el que supuestamente se debate sobre temas relacionados con la política del estado. Sin embargo, el radioescucha se desilusiona cuando escucha comentarios vacíos, superficiales y sin sentido. Pareciera que sólo buscan confundir, perdiendo de vista que su objetivo es difundir opiniones veraces, responsables y oportunas, que sirvan para orientar a todos aquellos que les hacen el favor de oírlos.
 
Los acontecimientos que se han dado en Tlaxcala en los últimos tiempos muestran la falta de interés que existe para llamar a las cosas por su nombre. Ahí está, por ejemplo, la pésima actuación de los integrantes del IET en las pasadas elecciones que, con el más absoluto descaro, pusieron en tela de juicio la voluntad ciudadana y permitieron que los comicios se convirtieran en una inmenso cochinero. Demostraron, con su turbio quehacer, que el único interés que tenían al llegar a esos cargos, era ganarse unos cuantos pesos mal habidos.

Hay que decir que la impresión generalizada acerca del pasado proceso electoral es de una degradación total y que constituyó una auténtica vergüenza para Tlaxcala. El resultado de tanta corrupción es que se tendrán que repetir las elecciones, para la alcaldía de Apetatitlan y para la diputación del distrito XIII de Calpulalpan. Pero como dirían en mi pueblo: “la culpa no la tiene el indio sino quien lo hace compadre”. Me reservo los calificativos que considero merecen todos los integrantes de este consejo del IET, empezando por su presidenta. Lo sorprendente del caso, o mejor dicho, lo indignante, es que a la fecha no se les haya hecho cargos por acciones que son claramente delictivas.   

Otro caso que me revuelve el estomago cada vez que lo menciono es el de los diputados que conforman la actual legislatura, la que, gracias a Dios, está por concluir su encomienda. Pero reconozcamos que estos no son los únicos, pues los que han sido sus antecesores en muy poco se diferencìan de todos aquellos que han desaprovechado a lo largo de la historia el alto honor de ser integrantes del Poder Legislativo de nuestra entidad. Qué poca m… han tenido quienes se han valido de sus cargos para hacerse de un dinero que, por sucio y mal habido, poco les habrá de rendir. Quizá alguno pueda salvarse de ser señalado como corrupto y de falto de progenitora. Pero eso, estimado lector, lo dejo a su criterio…


Frase para la reflexión

“si las personas fuéramos responsables de lo que hacemos conscientemente, los idiotas estarían libres de toda culpa”

Nota:

Hace unos días, de manera sorpresiva, patrullas municipales se dieron a la tarea de retirar de las calles los objetos –cajas, botes, huacales, etc.- que utilizan algunos comerciantes para apartar frente a sus negocios espacios en la vía pública. Esta limpieza causó la molestia por parte de quienes indebidamente se valían de esa irregular práctica.

Al respecto tengo tres observaciones:

1) es absurdo que, a estas alturas, cuando falta poco más de un mes para que concluya esta administración, por fin se actúe como si en realidad les interesara poner orden en la ciudad.

2) vale la pena aclarar que, en cualquier caso y en cualquier tiempo, el apartado de lugares en la vía pública es una falta administrativa que debe sancionarse de acuerdo al bando de policía y gobierno que nos rige.

3) al cuestionar un afectado a uno de los policías del porque de su acción, obtuvo como respuesta que, si quería un permiso para seguir cometiendo esa falta, debía acudir a la Tesorería Minicipal a pagar por el derecho de hacer de la vía pública su propiedad particular.

¿Qué opinión le merece lo que acabo de narrarles? ¿qué le parece que lo dispuesto por las ordenanzas municipales se las pasen por el arco del triunfo? ¿nadie piensa en la pésima imagen que se brinda a quienes vienen de otros lugares y sufren para encontrar un lugar en donde estacionar su vehículo?  ¿acaso todo esto no confirma la inmoralidad de quienes consienten estos desmanes? ¿se necesita mayor prueba de su voracidad y ambición?  

Como siempre mi total agradecimiento y absoluto respeto a quienes me brindan un momento de su tiempo. Gracias y hasta la próxima.