• Jorge Fernando Martinez Meza
Con tres grandes masones de fondo: B. Juárez. F. I Madero y Lázaro Cárdenas

Pie de foto: Con tres grandes masones de fondo: B. Juárez. F. I Madero y Lázaro Cárdenas

En el pasado número de la revista Proceso (N. 2179) de fecha 5 de agosto de 2018 en su página 8 en relación a un reportaje de Álvaro Delgado establece “Para él (Manuel Clouthier Carrillo) la designación de Bartlett es  un mensaje de López Obrador al grupo al que ambos pertenecen: ‘A esas sectas secretas que siempre tienen atrás a Benito Juárez. ¿Cómo se llaman?’. – ‘¿Masones?’ Inquiere el reportero. – ‘Esos. Yo no tengo nada contra ellos’, se quejaba Clouthier por el nombramiento de Barttlet y sus dimes y diretes con el ex gobernador poblano.

Lo que es un hecho innegable es que los mejores presidentes de México han sido Masones y con un claro compromiso con la justicia social, con la fraternidad, la igualdad y la justicia.

“El último presidente masón fue Adolfo López Mateos”, informó Ramón Sifri Jiménez, Venerable Gran Maestro de la Gran Logia Valle de México. Después de su periodo deviene la degeneración política de México con presidentes que no fueron masones como Díaz Ordaz, Echeverría, López Portillo, De la Madrid,  Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto.

Mención especial, es lo que redacta el propio Carlos Salinas de Gortari en su libro “un paso a la modernidad” en donde cuenta que su ingreso a la masonería fue un paso "casi natural. Mi abuelo materno había sido masón en grado 33. Ingresé a una Gran Logia, invitado por un amigo de la infancia, que años después sería líder del PRI en el DF. Respeté sus convicciones... pero, desde mi punto de vista, los masones vivían más del rito privado, que en una época fue clandestino, y esto era incompatible con el interés de tomar parte en las luchas abiertas y públicas de los grupos populares. Muy pronto solicité mi plancha de quite". Por lo que no se puede catalogar a este presidente como Masón,  desde luego su administración dejó entrever parte de su personalidad perversa, contario a lo que se persigue en masonería, hombres con sentido social.

Buenos presidentes Masones lo fueron Lázaro Cárdenas, Francisco I Madero. Abelardo Rodríguez, Venustiano Carranza, Eulalio Gutiérrez, Emilio Portes Gil, Pascual Ortiz Rubio. Miguel Alemán, Adolfo Ruíz Cortines, e incluso el vicepresidente Pino Suárez. En el siglo antepasado lo fue Guadalupe Victoria, Lucas Alaman, Melchor Múzquiz, Manuel Gómez Pedraza, Valentín Gómez Farías, Ignacio Comonfort, Miguel Miramón, Benito Juárez.

Por lo que con AMLO se recupera, después de más de 50 años, el sentido de la Fraternidad, de la Igualdad y de  la Justicia. López Obrador aseguró en víspera de las elecciones que en caso de ganarlas el pasado 1 de julio, convocaría a una Asamblea que elabore una “constitución moral” fundada en valores como el amor y el bien común, principios masónicos. “Desde el antiguo testamento hasta nuestros días, la justicia y la fraternidad han tenido un lugar preponderante en el ejercicio de la ética social”, dijo AMLO quien abundo  “preferencia por los pobres y los niños” al tomar protesta por el PES.  

En su discurso, López Obrador afirmó que los “ciudadanos, mujeres y hombres de buena voluntad” que participen en esa Asamblea, elaborarían “una Constitución moral, un Código moral, así como existe una Constitución política, vamos entre todos a elaborar una Constitución moral”.

Y añadió que los principios de la “constitución moral” serían “la justicia, la libertad, la igualdad y fraternidad”.

El 16 de diciembre de 2017, la periodista Nidia Marín redactó para el ‘Sol de México’ que “en el antepasado mexicano el mundo giraba al ritmo de la escuadra y el compás. Surgieron las denominadas “sociedades secretas” y durante un buen tiempo sus presidentes eran masones, pero también católicos. Plutarco, el más polémico, por ejemplo, durante La Cristiada fue excomulgado no por cerrar los templos, que no fue su obra sino de la propia Iglesia Católica en protesta por establecer la educación laica, presente en la Constitución desde 1857 y establecida de nueva cuenta en la de 1917.

Presidentes masones los hubo. Aseguran que fueron 17 en el siglo XX, otros dicen que más. Ejemplos: Plutarco Elías Calles, Lázaro Cárdenas del Río, Miguel Alemán Valdez y Adolfo López Mateos. 

Más allá de los mandiles contra las sotanas, de los grados contra las jerarquías, los masones venían de lejos. Desde el siglo XVIII en México. Señalan los historiadores, como María Eugenia Vázquez Samadeni en su trabajo “La masonería en México, entre las sociedades secretas y patrióticas, 1813-1830” que, tras la consumación de la Independencia de México, allá por 1826 “…dada la diversidad de tendencias políticas del momento, en las logias y cuerpos superiores del rito de York quedó reunido un heterogéneo grupo, formado por expartidarios del gobierno imperial de Agustín de Iturbide, por defensores del sistema republicano federal, por algunos exinsurgentes y por una gran cantidad de miembros de los sectores sociales intermedios del país, como sastres, escribanos, boticarios, zapateros, médicos, impresores, artesanos, labradores y barberos. Todos ellos formaron un grupo político que adoptó como bandera la defensa de la independencia, la república, la federación, la igualdad y la amplia participación política”.

Los ritos de entonces eran el escocés y el yorkino. En relación a la gran estructura masónica yorkina que se integró, la estudiosa especifica: “… sus jerarquías, sus canales de comunicación y las lealtades que generaba sirvieron para coordinar las acciones de un gran número de actores políticos en todo el territorio nacional. El ejemplo más claro de ello se presentó en 1828, ante las elecciones que designarían al segundo presidente de México. Sería realizada por las legislaturas locales, cada una de las cuales debía nombrar, a mayoría absoluta de votos, dos individuos. Los votos provenientes de los estados serían contados por el Congreso Nacional. La persona que obtuviera más votos sería el presidente y el segundo lugar ocuparía la vicepresidencia”. Lucharon a favor del héroe de la Independencia, Vicente Guerrero, pero no ganó. Con el tiempo lograrían triunfo, tras triunfo.

Actualmente hay varias logias en nuestro país. Son tres los ritos más numerosos: Rito Escocés Antiguo y Aceptado, Rito de York y Rito Nacional Mexicano. Pero también están: El Rito de Memphis y Mizraím, Rito Francés Moderno, Rito Egipcio de la CrataRepoa, Gran Rito Escocés Primitivo, Rito Francés, Rito Escosés Rectificado y Rito Templario”, hasta aquí la nota para el ‘Sol de México’.

El lunes 26 de marzo de 2018, en el portal  el ‘Blog de Masón’ establece un articulo llamado ‘La Masonería y AMLO’, en el que se destaca que “Desde hace muchos años Andrés Manuel López Obrador tiene el apoyo de la mayoría de los masones. Esto quedó en evidencia cuando el gobierno de Vicente Fox quería desaforarlo.
Masones procedentes de todo el país y de todas las logias se dieron cita en el zócalo para formar la cadena de la unión en apoyo a AMLO contra el desafuero.

Vestidos en su gran mayoría de negro, con los codos pegados a las costillas y las muñecas cruzadas sobre el pecho, aferrando a izquierda y derecha las manos de sus vecinos, centenares de ilustres y poderosos hermanos (y también ilustres y no menos poderosas hermanas) que pertenecen a las grandes logias y supremos consejos de nuestro país, formaron ayer en punto de las 14 horas, y teniendo como centro la bandera monumental del Zócalo, un "círculo de unión" para expresar el repudio de la masonería mexicana al inminente desafuero de Andrés Manuel López Obrador.  

Entrelazados de aquella manera porque la energía del sol, explicaba el maestro de ceremonias, "corre por nuestra sangre a través de todos nosotros, y para que el contacto sea más intenso debemos tocarnos también los pies", los herederos de las organizaciones liberales que florecieron en el mundo antes que los partidos políticos, gritaron al unísono, "repitiendo tres veces las tres palabras sacramentales":  -¡Salud, unión y fuerza! ¡Salud, unión y fuerza! ¡Salud, unión y fuerza! 

-antes de añadir- ¡Uno para todos y todos para uno! 

Y entonces concluyeron así: 

 -¡No al desafuero! ¡No al desafuero! ¡No al desafuero! 
Consigna que remataron con el más tradicional de sus gritos: -¡Que así sea! 

Para todo verdadero masón está muy claro el porqué el apoyo a AMLO. Hay grupos de intereses creados de ultraderecha que quieren hacer creer lo contrario para confundir. Son gente del Yunque o afines al Yunque que actúan como pseudomasones y quieren hacer creer que la masonería es de ultraderecha y que está contra AMLO. Para algunos el gran temor es solo que van a perder contratos o puestos de trabajo que consiguieron a través del nepotismo; y con AMLO de presidente ahora sí tendrían que trabajar honradamente para ganarse el sustento, ya no podrían seguir robando impunemente”, hasta aquí la información del Blog del Masón.

Correo electrónico:   [email protected]