• Pedro Morales
Aquí Xicohténcatl…

De no ocurrir alguna situación extraordinaria, este viernes estará de visita por segunda ocasión en Tlaxcala el presidente Andrés Manuel López Obrador, viene a entregar más recursos y se reunirá con los tlaxcaltecas una vez más “amor con amor se paga”, dijo alguna vez.

A seis meses de distancia de su tercer triunfo en Tlaxcala, en elección presidencial, se va a encontrar con las novedades de que hay cosas interesantes tras su anuncia  de esa Cuarta Transformación, aquí pasan otras cosas.

De entrada los recursos no fluye con la celeridad que se quisiera, en la Secretaría del Bienestar, alguien no está a la altura de las circunstancias y la gente no está contenta, los “servidores de la nación” siguen hechos bolas y la información de los avances en la otorgación de apoyos, no se sabe cuál es el avance real que se tiene a la fecha.

No hay una política adecuada de comunicación y se fomenta el oscurantismo en la información que solo se entrega a los amigos reporteros y periodistas afines a no cuestionar, ni preguntar, solo a publicar.

Otra novedad visible, es la fragmentación de MORENA-Tlaxcala, donde es evidente que se acerca el relevo en el gobierno local, se ha fragmentado como partido a causa de las ambiciones personales, sectarias y de grupo.

“Don Quijote y su fiel escudero Sancho Panza”, se encuentran al frente de un grupo que busca la gubernatura y están encarnados por los expriistas; el exgobernador José Antonio Álvarez Lima y Joel Molina Ramírez.

Todos están peleados con el grupo que encabeza la también expriista Lorena Cuéllar Cisneros, a quien señalan de todo y sobre todo no le perdonan que sigua con la mira de gobernar a Tlaxcala.

Un grupo más lo encabezan los Morenistas  de pura cepa, encabezados por  Ana Lilia Rivera, quien pregona a los cuatro vientos, como en su tiempo Mariano González Zarur que… “ya le toca”.

Otro grupo lo integran los legisladores locales, quienes a su vez ya se dividieron en dos grupos y en seis meses AMLO ya no los va a reconocer, dada la transformación física que han sufrido.

Los va a encontrar rozagantes, coloradotes y cachetones porque gracias a las recursos millonarios que reciben, su dieta se ha transformado y los mal pensados dicen que su gordura es el resultado de que están muy bien maiceados.

Eso sí, en ellos no aplica esa “austeridad republicana”, así lo demuestra además de sus kilos de más, su vestimenta que ha pasado de ropa del mercado a ropa de diseñador y de marca “Fifí”, ya que para ellos y ellas no existe eso de no tranzar, no engañar y no robar.

Bueno eso es lo que se palpa, porque además de sus posturas de nuevos ricos porque exhiben sus camionetotas, es evidente que su la joyería y hasta sus laps son de al mejor calidad, ya que simplemente se lo merecen como nuevos ricos que son.

Andrés Manuel López Obrador va encontrar una LXIII Legislatura totalmente transformada, donde cualquier parecido, entre la ficción y la realidad que se vive en Tlaxcala es real.

Cabe destacar que en torno a la actuación de nuestras y nuestros diputados locales, en su mayoría del partido MORENA que llegaron al Congreso, en este caso bajo el manto sagrado de los votos parejos  de su Mesías, tiene descontentos a los tlaxcaltecas.

Como en se cuento de George Orwell. “La Rebelión en la Granja”, donde la historia comienza con el señor Jones (el dueño de la Granja Manor), que, borrachísimo, hace un trabajo de pacotilla al terminar su… pues… trabajo.

Por suerte, en la granja hay un cerdo sabio: Viejo Mayor.

Viejo Mayor insta a todos los animales, descuidados por su dueño, a rebelarse y dirigir la granja ellos mismos, con una condición importante: la igualdad de condiciones para todos.

Y se muere.

A todos les parece una idea magnífica, salvo a Benjamín, un burro cínico cuya función principal en la vida es ser… bueno, un cínico.

Así pues, se rebelan.

Naturalmente asumen el liderazgo los cerdos, que son los animales más inteligentes.

Y hasta aquí llego la idea de la igualdad.

Y también la visión que tenía Viejo Mayor de que el golpe de estado fuera pacífico, pues enseguida surge un conflicto entre dos cerdos: Napoleón y Snowball.

Mientras que el primero no quiere hacer nada y estar a cargo de todo, el segundo desea enseñar a los otros animales y construir un molino de viento.

De más está decir que el plan de Snowball está mucho mejor, así que gana.

Esta obra clásica de la literatura que es a final de cuentas algo que tienen que ver mucho con la política, se ajusta a lo que pasa en la panza del Congreso local, donde este martes  ocurrió:

REBELIÓN Y RELEVO EN LA GRANJA

A la malagueña y con su respectivo “madruguete”, en sesión ordinaria del Congreso del Estado, el Pleno de la LXIII Legislatura Local avaló por mayoría de votos la designación de la diputada María Ana Bertha Mastranzo Corona, como presidenta de la Junta de Coordinación y Concertación Política en sustitución del “congresista “Víctor Manuel Báez López.

Una vez votada la propuesta de la diputada María Ana Bertha Mastranzo para incluir ese punto en la orden del día de la sesión ordinaria, la mayoría de los Congresistas validó la propuesta de relevo  con el fin de dar certeza al cambio tanto en la JCCP y de la Coordinación del Grupo Parlamentario de MORENA, que recayó en la misma Legisladora.

En ese sentido, la presidencia de la Mesa Directiva, instruyó a Báez López, llevar a cabo el proceso de entrega-recepción para dar cumplimiento a lo dispuesto en diversos artículos de la Ley en la materia.

En esta misma sesión, el Pleno Legislativo avaló por mayoría de votos, el acuerdo dado a conocer por la diputada María de Lourdes Cerón Montiel, por el que se destituyó a Melecio Domínguez Morales, del cargo de Secretario Parlamentario; en su lugar se designó a Maricela Martínez Sánchez, como encargada del despacho.

DIPUTADOS PÁJAROS

Nada que ver con el Hombre Pájaro de Cacaxtla, por pura vanidad como una premonición del futuro, integrantes de la LXIII Legislatura de Tlaxcala, en su mayoría emanados de Morena y sus secuaces , les dolió que a sus antecesores les hayan aventado un hueso de res, por eso de la reelección.

Para ganar simpatías, al llegar hace cinco meses, todos humildes, se escandalizaron porque los exdiputados dejaron muros para contener a las multitudes que acuden para que las y los diputados le devuelvan al ´pueblo los recursos que sirven para “gestión social”.

Pero algo pasó después de esa manifestación con burro y todo y las que en cascada se han desatado, como resultado de la falta de experiencia de los “congresistas” como les gusta que les llamen a las y los diputados locales.

Propios y extraños que anteriormente gozaban de libre acceso a la otrora “casa del pueblo”, comentaron que eso de “congresistas” es para que se sientan algo así como “congresistas gringos”, pero fue un invento de los chicos maiciados de la prensa que cobran con los morenistas.

Lo cierto es que cumplieron su amenaza y ya colocaron rejas en todos los accesos posibles, ya que dicen temer por su integridad, se sienten inseguros en esa empresa a la que llaman Congreso de Tlaxcala y que solo ha servido para enriquecerse.

Sin duda su actuación de legisladores -sin experiencia- los lleva a invadir esferas de competencia, como ya se ha advertido y se han convertido en el Gobierno Supremo que todo lo controla, todo lo ve y prepara el terreno para la dictadura que viene.

Los efectos van a ser devastadores para Tlaxcala,  si  es que nadie los para.

Como sea, estas rejas que no matan, pero que son muestra del tamaño del miedo de los legisladores que ganaron con el voto parejo, pero ganaron sin ganar a la sombra de “ya saben quién”.

En el peor de los casos como dicen los compas de las comunidades que desde hace tiempo no llegaban al Congreso y deben enfrentar las trabas y las rejas para ver a sus  otrora “representantes populares”.

Además de que en la isla de registro de entrada los vigilante obligan a una abundante aplicación de ese gel con alcohol en las manos, para que se desinfecten las manos, “no vaya a ser la de malas que si por casualidad saluden a su diputada o diputado, los vayan a contagiar de algo”.

Entre muchos comentarios de dolor y mentadas de madre, encabronamiento y frustración, en tono festivo consideran que los “congresistas” son en verdad “pájaros de cuenta”, que solamente se preparan para acostumbrarse a vivir tras barrotes.

Al respecto, el presidente del Comité de Administración del Congreso Local, Javier Rafael Ortega Blancas (a) “La Estaca Rielera”, declaró a los reporteros “congresistas” que la inversión destinada para el derribo de los “muros de la ignominia” fue de cien mil pesos, pues después de quitarlos colocarán rejas.

A pesar de que las rejas no contuvieron la manifestación de los burócratas del Sindicato de Trabajadores al Servicio de los Poderes, Municipios y Organismos Descentralizados de Tlaxcala, el matador de toros Rafael Ortega  dijo que los nuevos barrotes servirán para contener las nuevas manifestaciones, “aunque sea sicológicamente”.

Comentó que la determinación de colocar barrotes fue por decisión mayoritaria de los diputados, incluido el coordinador de la fracción parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática, Miguel Ángel Covarrubias Cervantes, quien impulsó la iniciativa de apertura.

“La verdad es que hablar del derribó los muros es algo paradójico ya que también se pondrán las rejas, es algo que se acordó y yo como el presidente del Comité tengo que velar por la seguridad de los compañeros, aunque las determinaciones ahí no son basadas en lo que yo diga”, expuso.

Reveló que la determinación de controlar los accesos derivó de las agitadas manifestaciones por parte de los integrantes de los sindicatos “7 de Mayo”, del Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud, Sección 27, organizaciones “campesinas”, transportistas, de los municipios y hasta artistas.

“Las manifestaciones que se dieron no fueron en la mejor forma, cuando se debió apremiar el diálogo entre ambas partes”, por lo que todos y todas las y los “congresistas” apoyaron la colocación de las rejas que ya son una realidad y que han convertido al Palacio Legislativo de Tlaxcala en una auténtica… “jaula de pájaros de cuenta”.

Es por eso y muchas cosas más, los tlaxcaltecas tienen confianza en esta nueva visita a Tlaxcala, que alguien le diga a nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador que su transformación en este rincón de la patria, es en realidad una Transformación de Cuarta.