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  • Pedro Sierra
La dirigente interina pretende manejar el tricolor y hacerse de una candidatura por la vía plurinominal para 2018.

A dos meses de haber renunciado como titular de la Secretaría de Gobierno (Segob) para ir en busca de la presidencia del Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Florentino Domínguez Ordoñez sigue en el limbo y sin fecha para que sea ungido como el dirigente del tricolor en el estado y asuma el control del instituto político para las elecciones de 2018.

Después de que se registrara sólo una planilla para la dirigencia estatal orquestando una imposición al estilo priísta, militantes se inconformaron y enviaron un documento al Comité Ejecutivo Nacional (CEN) en el que hacían saber la inelegibilidad de Domínguez Ordoñez por haber apoyado al Partido Acción Nacional (PAN) en las elecciones de 2004, lo que incluso le dejó como premio una cartera en el entonces gobierno de Héctor Ortiz Ortiz.

Mientras tanto la dirigente interina Blanca Águila Lima le ha dado mayor importancia a su reelección al frente del Sindicato de Trabajadores de la Secretaría de Salud (Sntsa), buscando imponerse nuevamente al frente de la sección 27 y quedarse al frente del tricolor para pelear por un espacio plurinominal para la elección del 2018, tal y como lo ha hecho saber a sus allegados.

El pretexto para la militancia priísta del estado es que el líder nacional Enrique Ochoa Reza no ha empatado la agenda con la del gobernador Marco Mena Rodríguez, razón por la que no han ungido aun al ex diputado local, sin embargo, extraoficialmente se sabe que existen diferencias entre el primer prísta del estado y el ex mandatario Mariano González Zarur, quien no vería con buenos ojos a Domínguez Ordoñez.

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