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El Gobernador de Tlaxcala, Marco Antonio Mena Rodríguez, sostuvo que el desfalco por 200 millones de pesos que observó la Auditoría Superior de la Federación (ASF) en el último año de la administración de su antecesor, el priista Mariano González Zarur, no genera problemas financieros a la entidad.
"Las observaciones son resultado de un análisis documental, no resultado de un dinero faltante. Lo que tenemos que hacer es responder con información a estas preguntas de la auditoría que se desdoblan en observaciones, donde tienen inquietudes, o solicitan información que debemos entregar", apuntó.
En su revisión de la Cuenta Pública de 2016, la ASF detectó anomalías en en manejo de recursos por parte de la Secretaría de Educación estatal y otras áreas.