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Acompañados de sus padres, hermanos y amigos de ambas familias, el pasado 23 de diciembre la pareja conformada por Geovanni Carreño Hernández y Liliana Pedraza Moya decidieron formalizar su relación ante un altar, y posteriormente ante el juez que atestiguó y legalizó la unión de estos apellidos.
Fue en la “Iglesia de San Cosme y Damián”, ubicada en San Cosme Xalostoc, donde la distinguida pareja dijo sus votos nupciales para después partir hacia el elegante salón que había sido elegido para albergar tan importante acontecimiento en la vida de esta pareja de docentes.
Araceli Hernández Muñoz y Enrique Carreño Clara, así como Hortencia Moya Avendaño y Palermo Pedraza López fueron testigos de la boda de sus hijos, quienes luego de una feliz y estable relación decidieron sellar su compromiso con el respaldo de sus padrinos de velación Marisol Pedraza Moya y Jorge Luis Sánchez Sánchez.
Una suculenta crema de papa, pasta a la poblana y una deliciosa pechuga rellena con verduras al vapor, así como un exquisito y monumental pastel de chocolate fueron ofrecidos por la feliz pareja, quien más tarde celebró su primer baile, para inmediatamente después recibir a la concurrencia en una elegante y moderna pista que fue acondicionada para esta especial noche.
Al evento asistieron familiares y amigos del Estado de México, Morelos, y diferentes partes del territorio tlaxcalteca, quienes en todo momento desearon parabienes a la joven, enamorada y prospera pareja.