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Será el próximo martes que arribe a Tlaxcala un representante del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para comenzar los preparativos para la renovación del Comité Directivo Estatal (CDE) y sustituir al inepto de Roberto Lima Morales de la dirigencia estatal, tras la debacle que sufrió el tricolor en las elecciones pasadas que lo mandaron al sótano de las preferencias electorales.
Trascendió que a la brevedad se emitirá la convocatoria para que a finales de este mes, se lleve a cabo la renovación de la dirigencia estatal y quitar el control del partidazo al dirigente que peores cuentas ha entregado a pesar de que el PRI en las pasadas elecciones tenía en sus manos el gobierno estatal y federal con la maquinaria que eso implica para los reconocidos operadores de este instituto político.
De acuerdo con información extraoficial, la dirigencia estatal buscaría una mayor participación por parte de la militancia para que la ciudadanía perciba un partido abierto a un proceso democrático y no por el tradicional "dedazo" que es característico del partido que aún gobierna en el plano local.
Mientras la postura del priismo estatal es la apertura para engañar a la ciudadanía, la dirigencia nacional se estaría decantando en favor de la candidatura de unidad, mejor conocida como imposición, método que ha definido a los dirigentes del tricolor a lo largo de su existencia como instituto político.
Y es que el dirigente saliente, Roberto Lima Morales ha sido el líder priísta que peor desempeño ha tenido al frente del partido del gobernador, Marco Mena Rodríguez, ya que a pesar de contar con los recursos económicos de tener de su lado la administración estatal y federal, sólo logró alcanzara séptima posición dentro de las preferencias electorales.