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Las autoridades detuvieron y trasladaron al Reclusorio Preventivo Varonil Oriente a un médico del IMSS, del Hospital General de Iztapalapa, que violó a una paciente con insuficiencia renal terminal y le negó el servicio de hemodiálisis para evitar que denunciara los hechos.

Agustín “N”, de 45 años, médico nefrólogo por la UNAM, evitó varios meses su captura, hasta el pasado jueves, cuando agentes de la Policía de Investigación de la procuraduría capitalina lograron judicializar la carpeta de investigación CI-FSP/B/UI- B-2 C/D/04263/11-2018 D03 por el delito de violación agravada, la cual fue abierta desde 2018 y estuvo a punto de ser archivada.

El pasado viernes, el juez de control Federico Mosco González, del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), le impuso la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa durante la audiencia inicial.

El juzgador le leyó los delitos imputados por violación agravada contra Wendy “N”, de 21 años, cometida en abril de 2018.

La lleva bajo engaños a un hospital

Se le acusa de que bajo engaños llevó a la mujer a la clínica 120 del IMSS para supuestamente practicarle algunos estudios que descartaran salmonela, pues la paciente presentaba un cuadro de diarrea.

De acuerdo con lo asentado en el expediente, al llegar al lugar el hombre salió de uno de los consultorios, verificó que nadie estuviera presente y la jaló al interior para ultrajarla, sin que ésta pudiera defenderse debido a su condición vulnerable por la enfermedad.

Se embaraza pero pierde al bebé

Tras estos hechos, la víctima quedó embarazada, pero debido a su delgadez y fragilidad tuvo un aborto espontáneo.

Mirna Moreno, abogada de la víctima, reveló que el exdirector del Hospital General de Iztapalapa Benjamín Ortega Romero tuvo conocimiento de la violación y del aborto, sin que procedieran contra el médico, pues argumentó que era el único nefrólogo, jefe de Servicios de Hemodiálisis, que tenía.

Exjefe de Gobierno turna el caso a la Procuraduría

Agregó que las autoridades capitalinas también fueron notificadas del caso desde el 15 de octubre de 2018, cuando llegó a las manos del exjefe de Gobierno José Ramón Amieva Gálvez, quien lo remitió a la Procuraduría General de Justicia (PGJ) Ciudad de México, donde se inició la investigación correspondiente.

Incluso, detalló, desde la llegada de la actual jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, y de la secretaria de Salud local, Oliva López Arellano, la administración tuvo conocimiento de la agresión, así como otras al interior de dicho hospital, de acuerdo con lo narrado por la abogada.

La litigante narró que el expediente de Wendy “N” se quedó rezagado y sin avances durante varios meses hasta que logró juntar las pruebas suficientes para solicitar al Ministerio Público las contemplara en la investigación.

Detectan al menos otros 3 casos

En entrevista, dijo que detrás de este caso encontró al menos tres más en donde pacientes atendidas en el área de hemodiálisis del nosocomio evidenciaron a la abogada las agresiones de las que fueron víctimas.

Incluso, añadió, en mayo de este año el imputado dejó de presentarse a laboral porque su contrato de acabó. 

El miércoles continúa la audiencia

Desde ese mes no se le volvió a ver, hasta que el jueves pasado agentes de la policía de investigación lo detuvieron.

La defensa del imputado pidió la duplicidad del término legal, por lo que será hasta el próximo miércoles cuando continúe la audiencia y el juez decide si lo vincula a proceso