• Política
Aun cuando operaron con toda la estructura electoral en su favor, sólo pudieron concretar 10 consejeros en un distrito la dupla de senadores

A pesar de que el secretario de Organización del Comité Ejecutivo Estatal (CEE) del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), Leonardo Cruz fue el encargado de realizar las asambleas y poner a gente cercana a Ana Lilia Rivera Rivera y a Joel Molina Ramírez para la elección de los 30 consejeros estatales, no pudieron controlar el proceso que se les salió de las manos y terminaron reventándolo en dos distritos federales.

Leonardo Cruz además de haber sido el coordinador de campaña de Ana Rivera, fue juez y parte, ya que mientras fungía como el encargado de este proceso encaminado a la renovación de la dirigencia nacional y estatal, también participó para ser consejero estatal y salió electo gracias a que todos los que formaron parte de esta elección fueron puestos por él para la organización.

De acuerdo con morenistas que no les dejaron participar, desde un principio se vio que había gente allegada de Ana Rivera y Joel Molina como participantes de las mesas, incluso personal que labora en el Congreso del Estado al lado del diputado Víctor Báez se encontraba ahí metido sin haber estado afiliados.

Un claro ejemplo de las trampas en las que habrían incurrido los dos senadores con sus respectivos equipos, fue que la secretaria del senador suplente, Jaziel Zarate oriunda de Chiautempan, fue sorprendida con boletas en mano cuando se encontraba fuera del lugar de la votación, lo que evidencia que los senadores manejaron a su antojo la elección.

Incluso la misma Ana Rivera forma parte de la Comisión de Elecciones a nivel nacional y de esta manera en conjunto con su ayudante Leonardo Cruz, pudieron preparar todo para tener las condiciones de salir con la victoria gracias a que habrían rasurado el padrón de los militantes para que sólo votaran los afines a ellos, por lo que quienes no se les permitió el sufragio se inconformaron.

Mientras lograron 10 consejeros para seguir imponiéndose dentro de MORENA, el descredito ante la ciudadanía es evidente y muestra que en realidad el pasado proceso electoral de 2018, lo ganaron gracias al arrastre de Andrés Manuel López Obrador, ya que en una elección solos no podría siquiera lograr el triunfo, según dicen sus mismos compañeros de partido.

Y es que aunque más de 30 millones de personas le dieron el triunfo al tabasqueño, ahora los morenistas del grupo al que sirven los senadores tlaxcaltecas, sólo quieren considerar al 10 por ciento de todos para sus decisiones.

Es así que a pesar de tener todas las fichas del ajedrez, los senadores de Tlaxcala no pudieron imponerse como tenían planeado y ahora el futuro es incierto, ya que es claro que el presidente López Obrador no apoya al grupo de Ricardo Monreal y Ana Bertha Lujan que tienen como sus operadores a los senadores tlaxcaltecas.

Tags: