Una clara muestra de la descomposición social que prevalece en estas campañas de proselitismo fue el sainete tragicómico que escenificó Noé Rodríguez Roldán al vestirse de cura, con sotana y estola en un acto de proselitismo.
Quería ser diputado local por el Distrito XII, otra vez.
Los priistas y sus dirigentes dirán misa, pero eso es una falta de respeto a la iglesia, sus creyentes, sus representantes y en Calpulalpan se ha pisoteado el respeto a las creencias y las costumbres.
No es que sea uno espantado, ahora los candidatos pueden vestirse hasta de diablos o hacer pactos con Satanás, con tal de lograr una curul en el Congreso o una alcaldía, el dinero que van a ganar vale la pena.
Entendemos que se trataba de un sketch cómico, con la participación de “Chabelita”, esa irredenta beata que con palabras de doble sentido hace reír a su público.
Se supone que es un espectáculo en el que se interactúa, pero no hay que hacer cosas buenas que parezcan malas, ya que el priista Noé Rodríguez Roldán ha sido diputado y hasta secretario de gobierno en el gabinete de Mariano González.
Quien a su regreso a Tlaxcala además del enfrentamiento de la procuradora Alicia Fragoso y el edil Orlando Santacruz, ahora debe meter en cintura a sus priistas que hasta se visten de curas, porque es tal su desesperación que ya no pueden.
Es toda una rebelión en la granja, además de que ahora ya comenzaron las salidas de priistas, como ocurre en Apizaco tras la imposición de Rafael Ortega, a quien apoyan con todo, pero no levanta.
Se ha tenido que vestir de luces en sus espectaculares, de esta forma tenemos que un candidato se disfraza de cura y el otro de torero, que nos faltará por ver, lo que indica que no han rumbo, ni control.
El caso de Noé Rodríguez Roldán va más allá de lo cómico, porque los momentos son tensos y que le parecería al estado que ahora en desquite los curas se dediquen a criticar a los políticos y a ridiculizarlos.
No se vale, el fin justifica los medios, en la guerra y la política todo se vale, pero hasta en los perros hay clases, se nota que algunos priistas ni de eso saben, son tan corrientes que hasta dan lástima.
Por otro lado el delegado especial del tricolor, manuel Cavazos Lerma sigue en su sueño de triunfos al más viejo estilo del PRI, dice que tiene puros candidatos invencibles y que +casi nació con el sombrero que lleva puesto.
Como van las cosas, todo parece indicar que el tricolor va derechito a la derrota, tal vez tenga tres oportunidades de que sus candidatos ganen la elección para diputados, y otros tres por la vía pluri, lo que indica varios escenarios.
El pero para el marianismo será que Ortiz se adueñe, como son sus intenciones de la mayoría en el Congreso, de tal forma que los próximos tres años van a hacer sufrir al Ejecutivo.
Por la tibieza en la actuación del actual gabinete, por no haber exigido cuentas, ni encarcelado a los ladrones, ahora le van a crecer los enanos y le van a hacer la vida imposible.
Caro le van a cobrar a mariano González su osadía de haberles tumbado sus notarías, eso es imperdonable y hasta se habla de que esta administración no verá la luz al final de los seis años.
Que se va a acabar antes, y al paso que vamos, sumando errores, desaciertos, resultados electorales y el rompimiento con la sociedad por una mala comunicación tendrán sus efectos.
Mientras que siga el proceso, que los políticos se vistan de toreros o de curas, da igual, van a perder y no importa que la mona se vista de seda… MONA SE QUEDA.