• Miguel Meléndez Meléndez
Desde tiempos remotos y en diferentes culturas...

....., se ha registrado el uso de sustancias psicotrópicas o relajantes, con fines curativos, rituales y hasta lúdicos, ya sea como una forma de buscar formas de comunicación con otros mundos o como parte de la idiosincrasia.

No obstante, en la vida moderna, el desarrollo de sustancias que tienen efectos secundarios para la salud de quienes las consumen, se han convertido en un problema para las sociedades.

Aunque algunas nacieron con un propósito médico, algunas drogas se convirtieron en un problema que debía atacarse, por lo cual en 1987, la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió establecer el 26 de junio de cada año como el Día Internacional de la lucha contra el uso indebido y el tráfico ilícito de drogas.

Con esta acción, se busca fortalecer las actividades para combatir el abuso de drogas ilícitas bajo la consideración de que representan un peligro para la salud de la humanidad, de ahí la necesidad de su control.

En este marco, la Comisión de Salud del Congreso local que me honro en presidir, no puede dejar pasar esta fecha para resaltar la importancia de realizar acciones que lleven a que los propósitos que dieron origen a la conmemoración de este día, se cumplan.

Más allá de hacer referencia a las cifras sobre consumo de alguna droga o la situación en el estado, como suele hacerse, esta vez quiero hacer referencia a un tema de escala global y al que estamos expuestos todos por la proliferación de las redes de comunicación, en el cual que precisamente centra la atención la ONU este año.

La Organización de las Naciones Unidas manifiesta que actualmente se ha disparado la demanda de sustancias fuera del control internacional, de ahí que para este año el lema del Día Internacional de la lucha contra el uso indebido y el tráfico ilícito de drogas es: “Anímate con tu salud no con las drogas”.

A través de diversas acciones se busca informar al público y especialmente a los jóvenes, de los efectos nocivos de las nuevas sustancias psicoactivas que proliferan hoy en día, para que se alejen de ellas.

Para este año, la ONU también alerta sobre la existencia de nuevos peligros por sustancias que son disfrazadas bajo nombres que pretenden dar apariencia de legalidad, pero que constituyen un serio peligro para la salud de las personas.

Refiere que, por ejemplo, existe la venta libre de sustancias que no han sido humanos y que representan peligros potenciales a la salud, e incluso se habla de que pueden solicitadas vía Internet sin ningún control.

Se trata de sustancias que pueden ser disfrazadas y comercializadas bajo el nombre de “euforizantes legales”, “productos químicos de investigación”, “comida vegetal” y hasta “sales de baño”.

A través de estas modalidades, es que las nuevas sustancias psicoactivas proliferarían a un ritmo sin precedentes, pero además representan un alto nivel de peligro, ya que los consumidores no tienen idea de lo nocivo de ellas.

Más aún, bajo estos nombres, los jóvenes son una presa fácil para el consumo, ya que piensan que se trata de sustancias legales y seguras, cuando en realidad representan un gran riesgo.

Incluso, la misma ONU en su página de Internet manifiesta que una de las formas de evadir los controles de drogas de estos productos es el etiquetado como “no apto para el consumo humano”.

De esta forma, el panorama es complicado para la salud pública, en virtud de que la presencia de sustancias psicoactivas sin control que aparecen de manera constante, su fácil acceso, potencial adictivo para los jóvenes y sobre todo el desconocimiento de su peligro para la salud por parte de los jóvenes y la sociedad en general, son una mezcla peligrosa.

Al considerar que la información que se da a conocer para este año expone que cada semana aparecen nuevas sustancias con efectos desconocidos, es necesario que el combate se dé en forma coordinada.

Como el mismo secretario general de la ONU, Ban Ki-moon expresó en su mensaje de este año con motivo del Día Internacional de la lucha contra el uso indebido y el tráfico ilícito de drogas, se requiere que “los gobiernos, medios de información y la sociedad civil, hagan todo lo posible por crear conciencia del daño que causan las drogas ilícitas”.

Es decir, en esta tarea no sólo es necesaria la intervención de las autoridades o los representantes populares, sino de los mismos familiares que detecten los riesgos potenciales, ya que de manera aislada poco o nada se podrá hacer.

No se trata de caer en la paranoia sobre la compra de nuevos productos que se comercializan de manera relativamente fácil en Internet, sino de estar alerta para lograr la protección de la sociedad y las nuevas generaciones.

*Presidente de la Comisión de Salud. Integrante de la LX legislatura