En todo un circo se ha transformado el registro de candidat@s que aspiran gobernar a los tlaxcaltecas, la lista es de más de quinientos aspirantes, lo mismo hay candidat@s que viven obsecionad@s por ser abanderad@s al gobierno del estado, que candidatos que solo son de ornato, en total son ocho los registrados, que según sus discursos demagógicos van a cambiar el rumbo de Tlaxcala, en esta danza de candidat@s hay quienes no tienen ninguna posibilidad de llegar y mucho menos de figurar en los primeros lugares y lo saben los angelit@s, ya que sus candidaturas obedecen al capricho de sus dueños , a la necesidad de sus institutos políticos de tratar de conservar su registro o simplemente al capricho de los hoy candidat@s, casos específicos los de Felipe Hernández, Jacob Hernández, Edilberto Algredo Jaramillo, Federico Barbosa y Martha Palafox, esta última, esperando que le haga el milagro el Trump López Obrador.
A dos meses y días de que se lleve a cabo la elección donde los tlaxcaltecas decidirán quienes serán sus Diputados locales, Presidentes Municipales, Presidentes Auxiliares y su Gobernad@r, los augurios de triunfalismo en todos los equipos de los candidatos están a flor de piel, aunque como vayan pasando los días las preferencias se irán acomodando, por cierto en la lista de candidatos aparecen nombres de políticos que han resultado ser unas verdaderas fichitas, que han tenido que pisar los reclusorios por cuentas pendientes con la justicia, ahí está el caso del candidato a diputado plurinominal el perredista Alberto Amaro, del Presidente con licencia de Zacatelco y algunos otros que con tráfico de influencias han logrado obtener sus cartas de antecedentes no penales y algunos que viendo la tempestad han decidido no participar, como un Chiautempense, quién prefirió apoyar a todos los candidatos priistas, que poder pisar la cárcel, lo increíble de estos casos es que mediante el pago de una fianza, la intromisión de líderes partidistas o hasta de legisladores locales, algunos lograron sus registros, lo que es una burla para la ciudadanía tlaxcalteca, aunque no solo este caso sea dado, pues hay candidat@s que si bien no son delincuentes, si son unos verdaderos mercenarios de lo política, porque digo esto porque si usted señor lector ve las listas de candidat@s, va a encontrar varios chapulines que no han terminado sus gestiones y ya buscan otro hueso, ojala la ciudadanía no se deja engañar y les de voto de castigo, también en las listas hay personajes que solo quieren el poder para tener inmunidad o simplemente para seguir utilizando a sus seguidores para sus proyectos personales y familiares ahí está el caso de Héctor Ortiz, Mari Carmen García, Guadalupe Sánchez Santiago, Federico Barbosa y otros más, que la ciudadanía tlaxcalteca no acepta pero que la ley les permite su participación.
En el caso de los candidatos al gobierno del estado de los ocho que se registraron solo tres o cuatro tiene posibilidades de ganar la gubernatura Lorena Cuellar, Marco Antonio Mena, Adriana Dávila y Martha Palafox, quien espera que con la compañía del Trump Obrador, en su campaña pueda dar la sorpresa, los otro cuatro solo harán sombra y dividirán la elección, aunque no se puede descartar que su participación solo sea para sumar votos para sus partidos políticos o para poder negociar al final una coalición de facto que les permita negociar posiciones con el candidat@ que vaya como puntero.
Según las encuestas y los comentarios de la ciudadanía tlaxcalteca, hasta este momento Lorena Cuellar y Marco Antonio Mena, encabezan las preferencias siguiéndoles la panista Adriana Dávila, quien al no lograr la adhesión de los Ortices, se puede ir en picada, aunque como lo dijo Felipe Hernández, que cada partido tiene su estrategia y el PAC, puede al final dar su apoyo de facto a la panista ya que el ex gobernador neopanista, en su gestión se vio favorecido por Felipe Calderón, quien si bien no le cumplió su capricho de dejarle poner sucesor, si le dio mucho apoyo y no solo el si no Santiago Creel, Diego Fernández de Cevallos , quienes le pueden recomendar o recordar a Ortiz Ortiz , que arrieros son y en el camino andan, aunque se ve muy difícil una reconciliación entre Adrianistas y Orticistas.