• Ángelo Gutiérrez Hernández
Acción Nacional nace ante la necesidad de fundar un partido político permanente para defender el respeto y la protección a la persona y el bien común; comprender el origen del Partido Acción Nacional, no solo es hablar de Manuel Gómez Morín, fundador del PAN y quien por una década

dirigiría al Partido Político, recordemos la pugna constante en el México de los años treinta, entre la iniciativa de reforma al artículo tercero constitucional a favor de la educación socialista; y la libertad de catedra en contra del Estado; es en ese momento donde las movilizaciones de jóvenes católicos integrarían un bloque de contención y resistencia en contra de la propuesta socialista.

Por  un lado se encuentra la Asociación Católica de la Juventud Mexicana (ACJM) nacida en 1913, organización de jóvenes católicos varones, quienes en todo momento debían obediencia a sus párrocos y a los lineamientos de las Autoridades de Acción Católica (instancia creada después de la Guerra Cristera, para organizar a los católicos), quienes querían tener el control de la juventud a través de la disciplina católica; y por otro la  Unión Nacional de Estudiantes Católicos (UNEC) nacida en 1931, impulsada por el Sacerdote Jesuita Ramón Martínez Silva, con la característica distintiva de organizar a jóvenes estudiantes universitarios, inspirados en los movimientos sociales católicos europeos, siempre protectores de su identidad católica, pero abiertos a la posibilidad de generar diálogo y debate de altura, una organización abierta a otras ideas, adaptándose y reconociendo el continuo proceso de secularización de la sociedad que se presentaba, movimiento que dio como resultado la generación más importante de intelectuales católicos.

Ambas movilizaciones de jóvenes, contrastantes en su forma de forjar la participación católica de  jóvenes en el espacio público y político,  sin embargo organizadas para impedir la hegemonía socialista así como el control y dirección de la Confederación Nacional de Estudiantes (C.N.E.), al impedir con ello la implementación del socialismo en la Universidad.

Los unécicos y acejotaemeros, así llamados por los cuadros a los que pertenecían, guardan una estrecha relación en la fundación del Partido Acción Nacional y sus primeros treinta años de vida, como componentes católicos que apoyaron a Manuel Gómez Morín y a los orígenes de Acción Nacional.

Los unécicos  ven como líder a Gómez Morín, entonces rector de la Universidad Autónoma de México, deciden apoyarlo en su esfuerzo de iniciar el proceso de organización política abierta,  intelectual y con responsabilidad plena, que tiene como resultado el nacimiento de Acción Nacional en septiembre de 1939.

Empero  los acejotaemeros siempre más ideológicos y dogmáticos,  se sumarían a Acción Nacional en los años cincuenta, cuando la dirigencia del partido es tomada por Juan Gutiérrez Lascuraín, militante en el partido, pero acejotaemero desde la Guerra Cristera. 


Desde el nacimiento del PAN se logran números triunfos en la história del Partido al obtener sus primeros lugares en la Cámara de Diputados e iniciar actividades parlamentarias.
Sin duda el espíritu del origen de Acción Nacional recae en el catolicismo de Gomez Morín,  entendido como lo señala Alonso Lujambio en uno de sus ensayos "un hecho histórico" y no como eje central de la identidad de una nación.

Finalmente Acción Nacional percibo tiene sus orígenes en dos grandes movimientos juveniles católicos, la Asociación Católica de la Juventud Mexicana de corte conservador (ACJM) y la Unión Nacional de Estudiantes Católicos de corte liberal (UNEC). Son quienes influyeron en la idea de Gómez Morin primero ante Vasconcelos y posterior en la construcción de Acción Nacional.