Las conductas que derivan en la indecisión afectan tarde o temprano en todos los ámbitos, pero en política…más.
“No sé por quién votar todavía”, “No pues…aún no sé”, “es muy temprano para pensar en alguien” o “No me decido”, son frases que acompañan a un grupo importante de personas que determinará la elección que vivirá el país el próximo año.
Las encuestas son una herramienta útil, para obtener el pulso electoral casi todo el tiempo, pero se debe emplear de una forma adecuada para no crearles falsas expectativas a sus candidatos. Deben ser como vistas el rating de un programa televisivo, si la audiencia baja, entonces hay que hacer una pausa, localizar la falla y aplicarse, para que su candidato vuelva a posicionarse.
Sin embargo, el equipo de trabajo de muchos candidatos “se duerme en sus laureles” y les basta con la amplia ventaja que la encuesta arroja, cuando poco caso hacen a otro grupo que denominan “los que todavía no deciden”, pero son ellos los que finalmente son los que determinan, reduciendo la ventaja del favorito.
Las estrategias electorales se basan en ganar el voto de la población, pero…cuesta el doble convencer a quienes son difíciles para tomar una decisión, los que un día están a favor de un candidato y al otro ya no…o peor aún, persuadir a alguien que ni siquiera le ha pasado por la cabeza quien podría ser su mejor opción como diputad@, president@ municipal o bien gobernador@.
Al final, cuando los indecisos se encuentran frente a su boleta electoral, votarán y lo harán al “ahí se va” o bien, con un poco conocimiento y de lo que representa cada candidato, dando así vuelta al resultado electoral, “pegándoles cada susto” a los predilectos de la contienda.
Afianzarse, mantenerse creativos y vigentes será la tarea de los favoritos a llevarse el “carro completo” porque habría que preguntarles a los “otros preferidos”, los que contendieron en las elecciones pasadas qué sucedió, en qué momento perdieron la brújula de la medición y por qué se confiaron tanto que actualmente son catalogados como los “ya merito”, “los que pudieron llegar”, mientras que los vencedores fueron “gran sorpresa” del sexenio anterior.
LO VIO AQUÍ PRIMERO…Todo apunta a que la próxima contienda electoral contará con una alta participación de la población pese al Covid-19…así que…a ponerse las pilas porque las encuestas dan una visión hacia el futuro pero no son determinantes.