• Mario Alberto Macías Palma
La Pluma Por La Espada

El gremio más grande de nuestra sociedad necesita que la transformación le llegue, porque el magisterio se lo merece, porque el grueso de trabajadores de la educación tienen vocación, porque han demostrado en estos casi dos años de pandemia el compromiso con la enseñanza y el cariño a sus discípulos. 

Por eso cobra trascendencia el relevo que está en puerta de la dirigencia sindical en Tlaxcala, en específico de la Sección 31 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), de por sí ya retrasado por la misma circunstancia de Perogrullo, donde el profesor Demetrio Rivas Corona, sin querer queriendo alargó su gestión. 

Pero no hay plazo que no se cumpla… ni maestros que no se rebelen, no hay que olvidar que Tlaxcala es, además, cuna de generaciones y generaciones de profesores y de rebelión, recordemos los años 90 con el autodenominado Movimiento de las Bases Magisteriales, que propició cambios allende límites estatales. 

La renovación de la dirigencia es, o debe ser, democrática; la participación de los mentores para elegir a sus representantes sindicales no ha podido ser expresada por voluntad individual, porque siempre se ha realizado a través de voto ponderado por delegaciones, cuyos delegados adeudan la satisfacción de sus miembros. 

Por ello, ahora que la democratización de los sindicatos impulsada como uno de los aciertos de la cuarta transformación del presidente Andrés Manuel López Obrador, donde cada miembro elige no sólo a que organización quiere pertenecer, sino que vota por el líder que mejor le pueda representar, los grupos de poder al interior del SNTE, y de otros gremios, tiemblan. 

Tal es el caso de SNTE 31, donde se supone que se polariza el voto del magisterio tlaxcalteca entre dos personajes que buscan la secretaría general: Arturo Morales Juárez y Cutberto Juárez de la Rosa, o eso quieren hacer creer los del grupo que impulsa al segundo. 

Detrás del profesor Cutberto, quien cobra favores a los supervisores, se habla de grupos que han ejercido el poder sindical, y que han aprovechado para obtener poder político, a saber:  

J. Carmen Corona; ex secretario de la Sección 31 y exdiputado local, presidente del partido de identidad magisterial e impulsor político de su hija, que no es maestra; Justo Lozano Tovar, exdiputado local y cuñado de un exgobernador que le dio plena potencialidad en la SEPE-USET del 2005 al 2010. 

Eso sólo como botón de muestra, ya que el SNTE, no sólo en Tlaxcala, ha sido trampolín político de los líderes sindicales, ahí está Rafael Zambrano, primero secretario sindical y luego diputado y alcalde de Ixtacuixtla, o Enrique Sandoval igual, del sindicato al Congreso, o el actual legislador Lenin Calva. 

Eso puede ser coincidencia, consecuencia o hasta un derecho, pero ¿qué tanta calidad tendrá su gestión cuando culmina en una posición política personal y no en la conformidad del gremio? 

Lo peor es tratar de trasladar las mismas prácticas de la política electoral partidista a lo sindical, como la presión, extorsión, chantaje, la simulación, inclusión llegar a amedrentar al votante, en síntesis, el fra-u-de.  

Explico: 

En la semana que terminó pudimos ver una encuesta en un medio informativo digital, en la que, de suyo la fotografía parecía dispar, una casi de estudio y la otra con gesto no favorable, pero sin cuestionar al autor de la encuesta, se pudo hacer un análisis donde se descubren a los famosos “bots” votando a favor de don Cutberto, y ni aun así pudieron dar voltereta al marcador. 

Se encontraron sufragios y cometarios a favor de dicho candidato con nombres ficticios y hasta en árabe o lenguaje asiático, ¡válgame no´más! cuentas de facebook con seudónimos incomprensibles e imposibles de rastrear como legítimos miembros del magisterio tlaxcalteca. 

Cabe aclarar que la intensión no es la identificación del elector y su preferencia, sino mostrar que la mentira y la deslealtad es un mal signo de quien recurre a ella para persuadir la voluntad de quien se pretende le enajene sus intereses laborales. 

Por ello, sería significativo que, con la nueva ola de la transformación de la vida política en el país, y su arribo a tierras tlaxcaltecas, quede claro que el sindicalismo magisterial requiere transformarse, y los maestros tienen en sus manos, ahora sí, la posibilidad de sacar a la mafia magisterial de la sección 31 y tener un representante que los entienda y sea leal a sus intereses. 

 

Dudas… ¿?¿?¿? 

 

¿El presidente municipal de Huamantla, Salvador Santos Cedillo, quiere regular la prensa con la prensa? 

¿El Chema ya se ganó una denuncia civil por abusar de la libertad de expresión? 

¿Huamantla Tv. más que medio informativo es instrumento de venganza y golpeteo? 

¿La bajeza moral del autor lleva a seudónimo, a medios ficticios y cuentas falsas en redes sociales? 

¿Es peor aun cuando se ataca a los familiares de sus ex contrincantes políticos, además, ocultándose en el anonimato?  

¿Libertad de expresión o libertinaje, es expresivo lo del exdiputado, sepultado políticamente?