• Ángeles Vazquez
Los retos de Tlaxcala

Si buen durante décadas los riesgos que representaba para las tlaxcaltecas el virus del papiloma humano, en la actualidad hoy son más que evidentes.

Y habiendo la posibilidad de inocular a las nuevas generaciones en particular y a todas las tlaxcaltecas en general, es sin duda más que adecuado hacerlo.
Una labor que la administración de Lorena Cuéllar Cisneros ha abrazado y desarrolla con firmeza.
Y como parte de esta acción es más que plausible el hecho de que a fin de prevenir casos de cáncer cérvico-uterino entre la población femenina de 12 y 13 años, el gobierno de Tlaxcala aplique vacunas contra el Virus de Papiloma Humano (VPH) a este sector poblacional para proteger su salud.
Inoculación que también se aplica a mujeres cisgénero y transgénero que viven con el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH).
La vacuna de una dosis se aplica en todas las Unidades de Salud IMSS-Bienestar.
Además de que brigadas especiales acuden las instituciones de educación básica para aplicar la vacuna contra el VPH.
Algo que es necesario tener en claro es que estrategia de vacunación inició en noviembre de 2022.
Y que el objetivo principal es garantizar la salud de niñas y adolescentes. De ahí que las brigadas de vacunación lleguen a las escuelas para aplicar la dosis a niñas y adolescentes que cursan primero y segundo grado de secundaria.
Al momento, 23 mil 632 jóvenes tlaxcaltecas de 12 y 13 años cuentan con la vacuna de protección contra el virus de papiloma humano, que es el causante de cáncer cérvico-uterino.
Pero lo más significativo es que las tlaxcaltecas  que aún no han recibido la vacuna pueden acercarse para recibirlas,  a las unidades médicas, a las brigadas médicas que visitan las escuelas secundarias del estado e incluso al  Centro Ambulatorio para la Prevención y Atención en SIDA e Infecciones de Transmisión Sexual (Capasits).
El reto, sin duda, es que en el mediano plazo no haya una tlaxcalteca sin la vacuna contra el VPH.