Qué pasa en Seguridad Pública en Tlaxcala?. A casi dos años de la actual administración gubernamental, resulta preocupante que la seguridad pública se haya convertido en el talón de Aquiles para el gobierno estatal en turno, pese a ser uno de los puntos neurálgicos para todo gobierno, pues se trata de una de las principales preocupaciones de los tlaxcaltecas, quienes cada día, son testigos de actos más atroces que van desde asesinatos, desapariciones y el incesante incremento de robos y asaltos.
Las cifras hablan por sí solas y, a la fecha, en Tlaxcala el gobierno no ha logrado afianzar a un personaje que logre, sino disminuir, al menos mantener los estándares que se tenían al momento del inicio de la actual administración.
Los números que se han difundido a través de los medios de comunicación, son suficientes para contrarrestar las cifras oficiales que difunde el gobierno, y en los que, afortunadamente Tlaxcala continúa situada dentro de las entidades más seguras del país, pero insisto, los hechos parecieran demostrar que cada día son más los actos de inseguridad que los vistos la semana anterior y así sucesivamente.
Pero a dos años del gobierno y con un proceso electoral a la vuelta de la esquina, urge que quiénes toman las decisiones para designar al responsable de la Secretaría de Seguridad Pública (SSC), le apuesten a un perfil, más que plagado con condecoraciones y un amplio currículum, en alguien que dé resultados y a quién se le deposite realmente la confianza para enderezar el camino que ya se perdió.
Ya quedó demostrado que los personajes externos simplemente no logran adecuarse a la realidad que se vive en Tlaxcala, por lo que deberían considerar seriamente en la posibilidad de designar a alguien local, una persona que se sienta comprometida con su entidad y valore realmente lo que significa trabajar para los suyos y, que al menos, de no efectuar un buen trabajo, sabrá perfectamente que podrá ser señalado y enfrentado por los ciudadanos.
Pareciera indicar que se trata de un asunto de confianza, pues quien dirige los destinos de la entidad, no logra ver eso en el trabajo de los tlaxcaltecas, sentimiento que podría atribuirse a que a lo largo de su trayectoria hay muchos que le han fallado y traicionado, y eso la obliga a desarrollar un mecanismo de protección que, manejado inadecuadamente, podría convertirse en el inicio de una destrucción por solo escuchar a un grupo de allegados que ya han demostrado no tener una visión clara para ayudarla a gobernar.
La libertad de expresión y la autocensura
El pasado sábado se celebró el Día del Periodista en Tlaxcala, reconocimiento que por Decreto del Congreso del Estado se estableció desde hace 21 años, pero aun cuando los periodistas que se forjaron de forma empírica y quienes se incorporaron más adelante, ya como profesionales en la materia han logrado adaptarse a las nuevas circunstancias, pareciera que cada año, la libertad de expresión ha venido a menos.
Resulta contradictorio que mientras hoy en día, debería existir mayor libertad de expresión de quienes ejercen esta profesión por el desmedido crecimiento en el número de medios de comunicación (alrededor de 300 según el último censo del gobierno del Estado y la gran mayoría electrónicos), lo cierto es que la libertad de expresión ha venido a menos.
La razón es muy simple, la mayoría de los medios de comunicación han nacido con el fin principal de convertirse en una empresa más y no en un espacio para ejercer la libertad de expresión en toda la dimensión de la palabra, algo que la ciudadanía debería comenzar a reconocer para identificar qué medios son realmente dignos de consultarse para forjarse una buena opinión sobre el diario acontecer en Tlaxcala. Enhorabuena a todos los compañeros dignos de ser reconocidos como periodistas.