Con broche de oro, está cerrando el año el presidente municipal de Apetatitlán de Antonio Carvajal, Ángelo Gutiérrez Hernández, quien al rendir su informe de resultados, lanzó mensajes que generaron mucha expectativa, emoción y esperanza.
Como parte del ejercicio de transparencia que ha enarbolado el edil panista, el sábado rindió su informe de actividades del segundo año de su gobierno y para sorpresa de muchos, en especial, de sus detractores del gobierno, del partido en el poder, no solo logró consensos, sino sumó voluntades a su causa.
La unidad deportiva Antonio Carvajal de Apetatitlán lució sus mejores galas. Hasta ahí llegaron liderazgos políticos, sociales, educativos, deportivos, culturales, entre otros, para ser partícipes de este ejercicio de rendición de cuentas.
Todos constataron que su gobierno ha sido de logros, de superación de adversidades, de remar contra corriente, pero sobre todo, de acciones a favor de la gente; todos constataron que se trata de una administración sin filias ni fobias, y de mucho trabajo.
Ángelo Gutiérrez, además de enumerar algunos de sus muchos logros, se mostró como un hombre de resultados y de capacidad política; lograr los consensos en su cabildo ha permitido estabilidad, pero generar acuerdos y expectativa en la sociedad ha sido evidente, porque muchos de los cerca de 4 mil asistentes, ya lo ven como un importante activo para el próximo proceso electoral.
Aunque no ha dicho ni cómo ni para qué podría participar, la movilización y concentración de liderazgos que tuvo en el informe lo ponen en la antesala de cualquier posibilidad electoral.
La oposición, la verdadera, necesita de esos activos, que no se doblan, ni repliegan y mucho menos, sucumben al poder, para contender en esta elección. También se requiere de mujeres y hombres que sumen voluntades, sobre todo, de aquellos incrédulos que han caído ante los cantos de sirenas que pronto se transforman en amargas pesadillas.
Lo hecho por Ángelo Gutiérrez puede quedarse como una simple anécdota, pero dependerá de su partido y de la oposición, usar su capacidad y capital electoral, para hacer frente al proceso electoral que arrancó el pasado sábado.