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Ante la llegada del nuevo gobierno de la 4T encabezado por Lorena Cuéllar Cisneros, José Aarón Pérez Carro renunció a la Secretaría de Gobierno (Segob) para ser premiado por sus servicios a Marco Mena Rodríguez y se le otorgue una de las tres notarías que se encuentran vacantes en la entidad.
El gobernador saliente, Marco Mena busca así premiar el gris trabajo de Pérez Carro al frente de la Segob, otorgándole una notaría para que pase cómodamente el resto de su vida al viejo estilo del priísmo más arcaico que impuso al aún mandatarios mediante un supuesto fraude electoral.
José Aarón Pérez estaría pretendiendo una de las tres notarías acefalas, ya sea en Tlaxcala, Calpulalpan o Zacatelco, con lo que aseguraría su vida por los pocos años en los que sirvió muy de cerca a Marco Mena.
Fue precisamente Pérez Carro uno de los incompetentes involucrados en el caso de Ayotzinapa, siendo el secretario de Gobierno el fiscal especial que no pudo dar resultados.