- Ixtacuixtla
Nuevamente la impunidad y la falta de una estrategia eficaz de seguridad, dejó en vulnerabilidad la gobernabilidad y a una familia de luto, luego de que la noche de este martes, fuera asesinato el presidente de Comunidad de Jilotepec del municipio de Ixtacuixtla, José Isael N.
Fue casi a medianoche de este martes que un comando armado siguió al presidente auxiliar y una vez que le dio alcance, detonaron sus armas en diferentes ocasiones para posteriormente huir sin mayor problema del lugar.
Este asesinato se suma a los más de 55 que se tienen contabilizados de enero a mayo de este año, todos ellos con mayor frecuencia y ahora toca atacar a autoridades electas que tienen una representación popular, emulando las acciones que se registran en otros estados por parte del crimen organizado.
Mientras aumentan este tipo de actos que atentan contra la gobernabilidad del estado, aún no existe o lo han dado a conocer una estrategia entre la Secretaría de Gobierno (Segob), la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) para hacerle frente a la delincuencia y se cumpla con la seguridad a los tlaxcaltecas.
Los titulares de estas dependencias son simplemente figuras decorativas que no han tenido la capacidad de cumplir con su tarea, mientras piensan en proyectos políticos personales o en aumentar su billetera con el erario público.
Con los datos oficiales que se tienen hasta el momento, Tlaxcala nuevamente rebasará los 100 asesinatos por año y se colocará con números similares a 2018 y 2019, siendo estos los años en los que más se han registrados homicidios dolosos.
De los 98 asesinatos ocurridos entre el 1 de septiembre y el 31 de mayo en los primeros 9 meses del actual gobierno, no se sabe cuántos han sido resueltos o cuantos responsables hay detenidos, lo que si se sabe es de las aspiraciones políticas de quien debería estar buscando la manera de justificar su oneroso salario.