- Educación
El conflicto que enfrenta la delegación sindical que representa a los trabajadores de las oficinas centrales de la Secretaría de Educación Pública del Estado (SEPE) y la Unidad de Servicios Educativos del Estado de Tlaxcala (USET), y que provocó el cierre, primero del órgano de control interno de dicha dependencia y luego del resto las instalaciones, tiene su origen en la exigencia del titular de la oficina contralora para que sus colaboradores se pusieran a trabajar.
Edmundo Vázquez José, titular del órgano de control interno de la SEPE-USET, lamentó la actitud de la delegada sindical en las oficinas centrales de la dependencia, a quien señaló de “solapar” la falta de compromiso de muchos de los colaboradores de esa secretaría, tras afirmar que “están acostumbrados a cerrar oficinas por cualquier motivo, pero no se comprometen con el trabajo para dar mejores resultados en lo que les toca hacer”.
El responsable de revisar la adecuada operación de la dependencia educativa, dijo que en este momento se encuentra abierta una investigación, motivada por la queja de algunos de sus colaboradores ante distintas instancias y de lo cual insistió en estar tranquilo, pues “yo siempre me conduje con respeto a todos”.
En este sentido, el funcionario estatal se dijo contrariado por los señalamientos que los inconformes hacen de él sobre acciones de hostigamiento al considerar que estas acusaciones también son actos de violencia hacia su persona, por las repercusiones de desprestigio y daño moral que le ocasionan.
Vázquez José, dijo que constantemente, muchos de los quejosos, le decían que faltarían a su trabajo, que se ausentarían en horarios de trabajo o trataban de justificar prolongadas ausencias, con argumentos que nunca fueron sólidos y que todo el tiempo, aun con que él podría negar a autorizarlos, siempre mostró empatía.
Sin embargo, a cambio de eso, Edmundo Vázquez explicó que siempre los alentaba a cumplir con su trabajo y dar resultados, lo que generó inconformidad, al grado de provocar que la delegada sindical, organizara el cierre del órgano de control interno y al ver que sus argumentos, pidiendo la salida del contralor, fueron imprecisos y sin solidez, optaron por cerrar las oficinas centrales de la SEPE-USET, lo que demuestra que “están acostumbrados a cerrar oficinas por cualquier motivo, pero no se comprometen con el trabajo para dar mejores resultados en lo que les toca hacer”.
En este consecuencia , el funcionario estatal, lamentó que lo sucedido haya tenido como origen la exigencia a sus colaboradores para dar resultados y que los inconformes tomen estos caminos de conflicto, “todo a causa de un pequeño grupo de personas que, aunque reconocen que yo era exigente en los resultados de su trabajo, prefieren generar conflictos en lugar de comprometerse con acciones positivas en beneficio de la sociedad tlaxcalteca”.