• Salud
  • Adolfo Tenahua Ramos
La escasez de insumos médicos y la falta de ambulancias son otros de los problemas que enfrentan los residentes.

Residentes del Hospital General de Calpulalpan han denunciado una serie de deficiencias graves en las condiciones de trabajo y formación que enfrentan, las cuales contravienen lo establecido por la Norma Oficial Mexicana NOM 033 SSA 2023. 

Según esta norma, los trabajadores que están en guardia por más de 8 horas tienen derecho a recibir dos comidas, y hasta cinco si superan ese tiempo. Sin embargo, los residentes de este hospital aseguran que solo se les proporciona una comida diaria, y en muchos casos, ni siquiera eso.

Además otro de los abusos en contra de los médicos es la deficiencia en la alimentación, los residentes reportan la falta de acceso a internet y a computadoras funcionales para realizar sus actividades profesionales y educativas, lo que obstaculiza su aprendizaje y el desempeño adecuado de sus funciones.

Por si fuera poco y ante la negligencia de los directivos del nosocomio y de autoridades abusivas del sistema de salud en el Estado, los jóvenes se encuentran ante la ausencia de médicos internistas en el hospital, lo que ha generado que los estudiantes de medicina sean forzados a realizar tareas que no corresponden a su nivel de formación ni a sus competencias. 

Esto pone en riesgo la calidad de la atención que se brinda a los pacientes y también afecta la preparación académica de los residentes.

Y es que la escasez de insumos médicos y la falta de ambulancias son otros de los problemas que enfrentan los residentes, lo que afecta gravemente la atención médica a los pacientes, especialmente en casos urgentes. 

La carencia de recursos adecuados también aumenta la presión sobre los médicos en formación, quienes a menudo se ven obligados a enfrentar situaciones difíciles sin los materiales necesarios para brindar una atención de calidad.

Por otro lado, los residentes han señalado que, aunque en sus contratos se comprometieron a recibir una beca, no han recibido ningún apoyo económico hasta el momento. 

A pesar de haber intentado resolver la situación de manera interna, la dirección del hospital no ha proporcionado una solución. Ante esta falta de respuesta, los residentes consideran que la solución debe venir de las autoridades estatales, específicamente del Secretario de Salud Estatal, para garantizar que se respeten sus derechos y se mejoren las condiciones laborales y de formación en el hospital.