- Tlaxcala
Más de 20 empleados federales del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), dirigido por Elon Musk, presentaron su renuncia este martes. Aseguran que las medidas adoptadas por el organismo ponen en riesgo los datos de los ciudadanos y desmantelan servicios públicos esenciales.
Los ahora exfuncionarios, que formaban parte del Servicio Digital de EUA antes de su integración en el DOGE, expresaron su descontento en una carta dirigida a la jefa de gabinete del presidente Donald Trump, Susan Wiles, y compartida con EFE.
“No usaremos nuestras habilidades como tecnólogos para poner en peligro los sistemas internos del gobierno, arriesgar los datos delicados de los estadounidenses o desmantelar servicios públicos fundamentales. No prestaremos nuestro conocimiento para ejecutar o legitimar las acciones del DOGE”, señalaron en el documento.
Preocupaciones por seguridad y despidos de empleados del DOGE
Los firmantes, que solo identificaron sus cargos sin revelar sus nombres, denunciaron que el proceso de integración del Servicio Digital en el DOGE ha generado riesgos de seguridad. Incluyendo entrevistas con supuestos miembros de la Casa Blanca en las que se les cuestionó sobre su lealtad política.
Además, alertaron sobre el despido masivo de empleados tecnológicos encargados de modernizar servicios esenciales. Según explican, una tercera parte de la agencia fue despedida a través de un correo anónimo, lo que generó una pérdida súbita de conocimientos tecnológicos y debilitó la seguridad de los datos de la población.
“Las acciones del DOGE -despedir a expertos técnicos, maltratar datos delicados, y romper sistemas fundamentales- contradicen su misión declarada de modernizar la tecnología y el software federales para maximizar la eficiencia y productividad gubernamentales”, añadieron.
Apoyo a quienes permanecen en sus puestos
Los exempleados también explicaron que, en lugar de acogerse al programa de despidos diferidos, decidieron renunciar como una muestra de rechazo a la gestión del DOGE. Sin embargo, expresaron su respaldo a aquellos que optaron por seguir en sus puestos y continuar con su labor en el organismo.
La situación dentro del DOGE sigue generando polémica. Se espera una respuesta oficial sobre estas renuncias y las acusaciones en torno a su funcionamiento.