- Política
La diputadal Madaí Pérez Carrillo volvió a mostrar su total desconocimiento y falta de compromiso en una reciente entrevista.
Al ser cuestionada sobre acciones concretas a favor de la comunidad LGBTQ+, así como de la población tlaxcalteca en general, no supo responder más que con evasivas y promesas vacías.
En lugar de detallar iniciativas, proyectos o resultados, la legisladora se limitó a decir que pronto difundirá un video con sus supuestas acciones, sin que haya evidencia alguna de trabajo real. Su discurso, lleno de ambigüedades, cantinfleo y rodeos, demuestra que ni conoce los problemas de la comunidad ni ha impulsado soluciones.
La actuación de Pérez Carrillo se ha convertido en un patrón: cuando se le cuestiona, evade; cuando se le exige resultados, calla. Mientras percibe un salario quincenal y mensual, la diputada no ha presentado propuestas que beneficien a Tlaxcala, y mucho menos a sectores vulnerables como la comunidad LGBTQ+.
Su presencia en el Congreso, más que fruto de vocación o compromiso, parece ser una cuestión de suerte, pues carece de preparación, conocimiento y proyecto político. Para quienes esperaban respaldo real y acciones concretas, solo quedan promesas vacías y la evidencia de una legisladora inactiva, ignorante y desconectada de la realidad.