• Educación
  • Alexxa Carrasco
Pese a que esto ya ha sido denunciado con la directora, María Virginia Tlecuitl Flores, esta avala las transas de los docentes

Alumnos del Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios (CBTis) número 3 ubicado en la capital de Tlaxcala, denunciaron una serie de abusos en los que incurren los docentes de esta institución educativa, específicamente, los cobros excesivos en copias de exámenes, el pago por la renta de Códigos de Barras Bidimensionales (QR) y hasta el cobro de engargolados que nunca entregan a los estudiantes.

Lo preocupante de este caso, es que los pagos son realizados de manera mensual y en el caso de los QR que son los materiales didácticos del profesor, solo por usarlos les cobra 10 pesos por estudiante que multiplicado por los 50 alumnos por grupo y los 250 a los que imparten cátedra, los docentes reciben hasta dos mil 500 pesos, a pesar de que esos QR son los mismos que ocupan para todos los grupos y en todos los meses, es decir, solo por la renta de esos papeles.

Desafortunadamente estas prácticas ilegales en contra de los estudiantes la realizan varios docentes, entre los que se encuentran Berenice Rodríguez Pérez, Rivelino Reyes González, y Lucía Flores Cerezo, pues otro de los abusos, es que cobran hasta cinco pesos por una copia simple en blanco y negro que en promedio tiene un costo de 50 centavos en cualquier papelería, es decir, por las copias para los cinco grupos donde aplican exámenes mensuales que les salen en solo 125 pesos, las docentes se embolsan mil 250 pesos.
 
Por increíble que parezca, aunque los alumnos ya han externado su molestia tanto con los docentes como con la directora de la institución, María Virginia Tlecuitl Flores, para solicitarles que respeten el costo real de las copias, solo les han dado excusas absurdas como que, en el lugar donde ellos imprimen, en eso se las cobran y otros hasta han asegurado que se tratan de “copias especiales”.

Algunos estudiantes denunciaron que también continúa el acoso sexual en contra de las alumnas, un problema que es añejo y donde los directivos han hecho caso omiso.

Finalmente, denunciaron que la directora ha exigido a los estudiantes la donación de juguetes para la entrega a población vulnerables, pues desean darlo a conocer en periódicos locales como una gran hazaña, para lo cual, ha amenazado a estudiantes con bajarles puntos si no cooperan con la donación.

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