- Seguridad
Dado que un mal uso de los fuegos pirotécnicos puede ocasionar un accidente de consecuencias fatales, la Coordinación Estatal de Protección Civil, previo a las celebraciones de Navidad y Año Nuevo emite una serie de recomendaciones para el debido uso de artificios pirotécnicos de juguetería (cohetes).
Previa a una reunión que se tuvo con los secretarios Técnicos de Protección Civil Municipal, el día martes 09 de diciembre del año en curso, donde se tomaron acuerdos para evitar accidentes derivado al uso de la juguetería pirotécnica, uno de los principales puntos fue el de prohibir la comercialización en sitios donde no cuentan con la normatividad y marco jurídico, solo pueden vender los permisionarios que cuenten y estén en regla con los permisos expedidos por la SEDENA y en base a la Ley de armas de Fuego y Explosivos, y por la Coordinación Estatal y Municipal de Protección Civil, solicitando el cumplimiento de los requisitos que establece el marco jurídico en materia de protección civil.
A ello agregó el C. Joaquín Pluma Morales, Coordinador Estatal de Protección Civil, que en coordinación con otras dependencias supervisen constantemente los lugares destinados a la venta de fuegos pirotécnicos, además de vigilar permanentemente los mercados y lugares públicos para evitar la venta clandestina de todo tipo de explosivos.
En este sentido comento que realizan recorridos constantes por lugares públicos como mercados, tianguis, comunidades rurales y colonias de la entidad para la localización de almacenamiento y venta clandestina de artificios pirotécnicos de juguetería y proceder a su aseguramiento.
Por tal motivo invitó a la población, a participan en la vigilancia para denunciar al 066 o a los teléfonos de la Coordinación Estatal 46 2 17 25 y/o 46 2 54 79, los lugares donde se expide la venta clandestina de este tipo de artefactos.
Para terminar reconoció que un mal uso de los fuegos pirotécnicos pueden provocar quemaduras e incluso amputaciones de miembro, por tal motivo a manera de recomendación enlistó: no permitir a menores que los utilicen, no guardarlos en los bolsillos de la ropa y no quemarlos si se usan prendas sintéticas, pues el material puede adherirse la piel si se incendia y causar daños mas severos. Y en caso de mal funcionamiento de los artificios, no insistir en detonarlos, ni quemar grandes cantidades de ellos al mismo tiempo, además de ser almacenados en un lugar fresco y seco, alejado de fuentes de calor o llama, sin que se encuentren al alcance de los niños.