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Las negociaciones entre el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) y la empresa productiva del Estado siguen su curso a unas horas de la fecha límite para entregar la revisión del contrato que se realiza cada dos años.
En esta ocasión, la negociación toma un mayor valor, pues los pasivos laborales de Petróleos Mexicanos (Pemex), es decir, el sueldo que se paga a jubilados y pensionados de la empresa, ascienden a 1.7 billones de pesos de los que el gobierno mexicano absorberá 20% como deuda pública.
Sin embargo, para que se consolide este punto, en el Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) se deben modificar algunas reglas, con el objetivo de aminorar el crecimiento de esta cifra.
De acuerdo con una nota del periódico 24 Horas, la fecha original para el cierre de las negociaciones fue modificada por Pemex y el sindicato, pues las pláticas tropezaron, debido a la incertidumbre sobre el futuro de los jubilados de Pemex, así como del aumento en la edad para el retiro para los trabajadores en activo, de 55 a 65 años de edad.
Además, la empresa productiva del Estado tuvo que recortar el monto destinado al pago de la nómina a 10 mil millones de pesos, lo que obligaría a Pemex a recortar 2.0% su personal, lo que representa jubilar anticipadamente entre dos mil y tres mil empleados con plazas que no se volverán a ocupar.
Buscan retrasar jubilaciones
Si se modifica la edad de retiro en el sistema de pensiones de Pemex, el grueso de los trabajadores, entre empleados de confianza y sindicalizados, poco más de 132 mil 123, tendrán que esperar entre 15 y 40 años para jubilarse si deciden acogerse al parámetro de edad máxima para dejar de trabajar.
De estos, 22 mil 461 son mujeres que laboran en diferentes áreas de la empresa productiva del Estado.
Según otra nota del diario El Universal, otra cláusula que también puede sufrir modificaciones, según las fuentes, es el requisito de 25 años de antigüedad para optar por la jubilación.
Con este parámetro, los trabajadores que tuvieron la oportunidad de ingresar a la entonces paraestatal cuando tenían 18 años podían jubilarse a temprana edad (43 años) y ocuparse en otro empleo, con su respectivo salario, más su pensión mensual.
En el más reciente Informe de sustentabilidad 2013, último dato disponible, Pemex asegura que “el promedio de antigüedad es de 19.1 años para la planta de operación”.
Esto significa que de seguir el actual esquema pensionario en la empresa petrolera para 2021 prácticamente toda la plantilla laboral de Pemex estará en condiciones de retirarse.
Hasta hoy, según información de la Dirección Corporativa de Administración de Pemex, 18 mil trabajadores siguen laborando en la empresa a pesar de haber cumplido 55 años o más de edad, rango etario que el actual Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) y el Reglamento de Trabajo del Personal de Confianza de Petróleos Mexicanos y Organismos Subsidiarios (RTPC) marcan como opción para el retiro.
De ellos, 2 mil 103 pueden retirarse con el nuevo esquema, pues superan los 65 de edad; otros 4 mil 358 tienen edades entre 62 y 66 años.
Para Pemex, según el Informe de resultados del pasivo laboral de Pemex realizado por la Auditoría Superior de la Federación, el problema de las pensiones radica en parte en la insuficiencia de recursos para pagarlas.
Entre 2003 y 2014, el plan de pensiones “no estuvo fondeado, ya que el saldo de los activos del Fondo Laboral de Pemex (Folape) y el Fideicomiso de Cobertura Laboral y de la Vivienda (Ficolavi) se redujo considerablemente” al pasar de 13 mil 88 millones de pesos a sólo 665 millones, en tanto que las obligaciones por beneficio definido aumentaron de 312 mil 919 millones a un billón 474 mil millones de pesos en el mismo periodo, lo que generó un déficit actuarial que creció en la misma proporción en que aumentaron las obligaciones pensionarias; en consecuencia, no se cumplió con el objetivo establecido en los fondos de maximizar los recursos destinados a solventar las obligaciones que Pemex tiene con sus trabajadores respecto del pago de beneficios al retiro consignados en el CCT y en el RTPC.
Adicional a la insuficiencia de recursos que registraron dichos fondos, en el lapso referido se incrementó el número de personas que pueden recibir pensión, ya que la cifra de pensionados creció 55.1% por la implementación de programas de retiro anticipado y la plantilla de trabajadores activos se incrementó 9.7%, por lo que se registró un crecimiento poblacional total de 26.3%.
Esta situación agravó aún más el problema de financiamiento, pues mientras en 2003 Pemex había asumido la responsabilidad de otorgar pensiones a 184 mil 716 trabajadores en activo y pensionados, para 2014 debía ya otorgar pensiones a 233 mil 364 empleados, sin contar con una reserva para afrontar tales obligaciones.
Así pues, según las fuentes consultadas, “son necesarios cambios de fondo en esta revisión contractual para evitar un problema mayúsculo que ponga en riesgo la viabilidad de la empresa productiva del Estado”.