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Las personas que fallecieron fueron infectadas por falta de control en áreas no atendidas como la de hemodiálisis

Las anomalías toleradas y presuntamente auspiciadas por la aún delegada del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), Perla López Loyo habrían sido fundamentales para que al menos siete pacientes del nosocomio ubicado en el municipio de Tlaxcala, perdieran la vida entre octubre de 2018 y enero de 2019.

Familiares de los pacientes que perecieron y pidieron el anonimato por temor a represalias por parte de la jarocha, sostuvieron que fueron infectados en la unidad de hemodiálisis al no haber control en áreas no atendidas por falta de exahustivos, lo que derivo en el fallecimiento de quienes supuestamente fueron víctimas de la negligencia y mal manejo del ISSSTE por parte de la camaleónica López Loyo.

La falta de un médico estable en el área y la presencia de una episteme bacteriológica, habrían sido la causa por la que se complicó la de por sí difícil situación que tenían los pacientes debido al contagio que se habría provocado por una clara negligencia por parte del personal y de los directivos de la institución.

Los familiares de los fallecidos, incluso dieron a conocer a este medio que el personal que labora en la unidad de hemodiálisis, sale a la calle y regresa al nosocomio sin cambiarse los uniformes quirúrgicos, lo que permite la contaminación de áreas tan vulnerables como lo es la que se destina a la aplicación de hemodiálisis.

Mientras continúan las anomalías en el ISSSTE, Perla López amenaza con no ser removida del cargo al ser apoyada por uno de sus compañeros orticistas incrustados en el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), quién con ayuda del senador Álvarez Lima piden que no sea removida la jarocha de este espacio.

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