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A unos días de que fuera destituido en el pleno del Poder Judicial de Tlaxcala como presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE), Héctor Maldonado Bonilla obtuvo por parte de la justicia federal un amparo que le permite continuar al frente de los siete magistrados que en su mayoría decidieron que era hora de dejar la presidencia de este Poder.
La suspensión provisional procede con efectos restitutorios, por lo que quedarían invalidas las designaciones no solo de los nuevos funcionarios nombrados por Mario Antonio de Jesús Jiménez Martínez, sino que tendrían que respetarse las posiciones que eran de los marianistas.
De esta manera, la mayoría de los magistrados se quedarán con las ganas de restarle beneficios a los marianistas que se enquistaron en el Poder Judicial ante la llegada del gobierno impuesto por Mariano González Zarur pero que a la postre rompió con él.