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El sujeto violaba a su hijastra desde el año 2011.

La Procuraduría General de Justicia del Estado (Pgje) aprehendió en la comunidad de Acuitlapilco, municipio de Tlaxcala, a un sujeto que violaba a su hijastra desde el año 2011, motivo por el cual fue recluido en el Centro de Reinserción Social (Cereso) para que desde allí enfrente su proceso penal.

La orden de búsqueda y aprehensión se giró dentro del proceso 298/2013, instruido en contra de Emidio Daniel Capilla Temalatzi, como probable responsable del delito de violación agravada.

Asimismo y gracias a que el Juzgado Tercero de lo Penal del Distrito Judicial de Guridi y Alcocer obsequió la orden de aprehensión, la Policía Ministerial del Estado se abocó a las pesquisas correspondientes a fin de dar con el paradero del presunto responsable.

Por ello y derivado del trabajo de investigación de campo, los detectives obtuvieron indicios importantes sobre el paradero del sujeto, ya que de acuerdo a las pesquisas podría ser localizado en la comunidad de Acuitlapilco, municipio de Tlaxcala, por lo que con esta información montaron un operativo de búsqueda.

Fue así, que a las 19:30 horas, del 14 de agosto, los adscritos a la Pgje lograron ubicar en la calle 16 de Septiembre, comunidad de Acuitlapilco, a un sujeto cuyas características fisionómicas correspondían con las del sospechoso.

De esta manera, los encargados de procurar justicia se aproximaron al individuo y al comprobar que se trataba de Emidio Daniel Capilla Temalatzi, de 52 años de edad, le informaron la situación que prevalece en su contra, por lo que fue asegurado y trasladado Centro de Reinserción Social (Cereso) de la capital, desde donde enfrentará su proceso legal.

Cabe resaltar, que desde el año 2011, el probable responsable aprovechaba la ausencia de la madre de la menor para forzarla a tener relaciones sexuales con él, bajo la amenaza de que si no cooperaba,  no le compraría sus útiles escolares.

Dos años después, la menor que actualmente cuenta con 11 años de edad, decidió confesarle todo a su madre; sin embargo, su progenitora no le creyó, incluso, la corrió de su propia casa, por lo que la víctima tuvo la necesidad de alojarse con su abuela, a quien le comentó los hechos y decidieron acudir a la Pgje a interponer la querella correspondiente, que concluyó con la captura del inculpado.

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