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Arrecia pleito político entre la ex legisladora federal, Rosi Orozco, y la senadora Adriana Dávila

En los últimos días, se han presentados serios contrastes con respecto al combate del delito de trata en el estado de Tlaxcala; en un extremo, la senadora apizaquense insiste en su afán de realizar reformas de retroceso a la Ley General contra la Trata de Personas sin entender razones y sin pensar en las víctimas.

Recalco que soy la primera persona en desear que la ley se perfeccione y avance, sin embargo esa propuesta a todas luces pretende que ocurra todo lo contrario, es decir que los cambios abonan al retroceso buscando el favor de personas a las que les conviene el estancamiento legal en la materia, con miras claras de sumar adeptos para su próxima campaña en busca de la gubernatura,  votos de confianza que los tlaxcaltecas no le dieron en las elecciones del 2010.

La también presidenta de la Comisión Contra la Trata de Personas, asegura que las reformas serán aprobadas, incluso anunció que el dictamen ya trabajado se presentará en el mes de febrero cuando inicie el nuevo periodo ordinario de sesiones, omitió decir que senadores responsables, consientes y sensibles con el tema como  Raúl Cervantes, Pablo Escudero y Lucero Saldaña, están revisando esa propuesta que mañosamente Dávila trató de evitar que pasara por la Comisión de Justicia para no evidenciar la reforma a los tipos penales.

Ella declaró en una reunión con medios de comunicación en Tlaxcala que yo me opongo a esos cambios más por protagonismo, que diferente manera de pensar tenemos porque tengo entendido que la lucha contra la trata de personas es poner en riesgo mi vida por el amor a las familias de México y ella entiende esa  lucha como la carrera para llegar a la gubernatura.

Por otro lado, el gobernador Mariano González Zarur se comprometió a combatir “de frente y sin reservas” el delito al que consideró un cáncer social, el cual ha sido atacado e informó que a la fecha el Estado ha logrado seis sentencias condenatorias contra proxenetas y la liberación de 98 víctimas, esto durante el mensaje a la ciudadanía que emitió el día de ayer con motivo de su tercer Informe de Gobierno.

El gobernador reafirmó: “como lo señalé ante la comisión especializada de la ONU, no se detendrá y se seguirá combatiendo este problema de la mano de la sociedad”, aplaudo ese compromiso y me mantendré pendiente de que así sea, si es un cáncer social, pero lo primero que necesitaba este país es  escuchar que el problema se reconoce y no se niega como lo hacía su antecesor en mi cara.

Nos gustaría escuchar a más gobernadores en México dar la importancia al ser humano, nos hemos cansado de escuchar cifras de armas incautadas, droga decomisada o coches recuperados, pero ahora escuchamos a un gobernador hablar de lo verdaderamente importante, víctimas rescatadas de esta terrible esclavitud.

También, fue bueno e inspirador escuchar el reconocimiento a través del aplauso caluroso que recibió el jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera de los asistentes al Centro de Convenciones donde se llevo a cabo el evento, reconocimiento merecido, pues ha metido a la cárcel a más de 150 padrotes originarios de Tlaxcala y eso es lo que quiere un estado tan bello, tan lleno de cultura, “cuna de la nación no de tratantes” como reza una frase que se difundió en redes sociales.

En un trabajo de comparación, el anterior gobernador Héctor Ortiz Ortiz negaba tajantemente la existencia y el alcance del delito de trata de personas, hoy un mandatario lo acepta, lo combate y se compromete a seguir en esa lucha, eso significa un gran paso para lograr erradicar un problema mundial y uno de los delitos más vergonzosos que existen, ya que priva de su dignidad a millones de personas no sólo en la entidad, en el país y en todo el mundo, tan es así que está considerado el segundo delito más importante en términos de ganancias en México sólo después del narcotráfico.

Pero lo anterior parece ser de poca importancia para Adriana Dávila, quien en su afán de llegar a  la gubernatura quiere quedar bien con los padrotes al insistir en Reformas que los benefician, sabemos que grupos de poder ligados a la trata de personas financian campañas políticas, ¿será este el caso en el estado de Tlaxcala?.

Tlaxcala tiene gente buena y trabajadora son los menos los que ensucian el nombre de un estado tan importante, por eso  la unidad entre Miguel Ángel  Mancera y Mariano  González  puede ser una sinergia para terminar con los padrotes, por ejemplo un curso con el magistrado Edgar Elías dirigido a los jueces permitiría tener más sentencias y un seminario para Ministerios Públicos por parte del la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal sería una buena opción para sumar esfuerzos entre las dos entidades federativas en aras de ampliar los alcances en la impartición de justicia.

A pesar de esos claroscuros, aprovecho para agradecer al gobernador de Tlaxcala Mariano González Zarur por buscar el bienestar de las y los ciudadanos, le ratifico que cuenta usted con la Comisión Unidos Contra la Trata A.C, le comparto el número telefónico al que pueden denunciar el delito 018005533000, al tiempo comunicarle que estaremos promoviendo en el estado el próximo 14 de febrero que la población baile y manifieste contra la trata de personas y la violencia de género.

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