- Política
En el marco del análisis de la política social del segundo informe de gobierno del Presidente de la República, la senadora panista Adriana Dávila Fernández aseguró que los senadores de Acción Nacional vigilarán la correcta aplicación de los programas sociales, así como sus reglas de operación para evitar la desviación de recursos.
Dávila Fernández apuntó que las reglas de operación de los programas sociales funcionan de manera contradictoria a los dichos públicos, pues prevalece la opacidad.
“Son insuficientes los mecanismos para evitar la desviación de recursos, pero es más indignante la falta de voluntad de los distintos órdenes de gobierno para dar información sobre el ejercicio de recursos públicos para el desarrollo social y, lo más importante, sobre sus resultados”, dijo.
En este sentido, afirmó que el blindaje de los programas de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) “no tiene que ver sólo con la destitución de personajes o de delegados, tiene que ver con un blindaje desde las estructuras internas, sobre las acciones que se están haciendo”.
“El Gobierno federal hoy tiene el compromiso de mejorar los procedimientos, de mejorar y eficientar todos los procedimientos”, por eso “la destitución de ningún funcionario acaba de raíz con los procesos de corrupción y mucho menos con los manejos electorales que se generan en los estados y municipios”, dijo en tribuna.
Durante la comparecencia de la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, la senadora panista aseguró que en el país existe un deterioro del tejido social, así como falta de oportunidades y la innegable repetición del círculo vicioso de pobreza, políticas asistencialistas y corrupción.
Sostuvo que mientras de parte del Gobierno federal prevalece una actitud triunfalista en el rubro de combate a la pobreza, “para alrededor de 54 millones de personas en esta situación sencillamente es algo que sólo padecen, y en lo que no han tenido respuesta”.
Consideró que la política económica y la de combate a la pobreza están caminando por rumbos separados y con extrema lentitud.
“Ahí está el círculo vicioso opacidad, corrupción, impunidad, que nada contribuye al desarrollo integral de los grupos vulnerables en todo el país, sea en áreas urbanas o rurales”, concluyó la legisladora por Tlaxcala.
23 de septiembre de 2014
Versión de las intervenciones en tribuna de la senadora Adriana Dávila Fernández durante la primera ronda de preguntas durante la comparecencia de Rosario Robles Berlanga, secretaria se Desarrollo Social, para el análisis de la política social del Segundo Informe de Gobierno
Con su venia, señor presidente, señora Secretaria Rosario Robles, bienvenida nuevamente al Senado de la República, por segunda ocasión.
Senadoras y senadores, en distintos espacios y oportunidades Acción Nacional ha procurado transmitir las inquietudes y preocupaciones del pueblo de México: economía familiar, seguridad en la calle, colonia, barrio o comunidad, así como el combate frontal contra la corrupción.
Por desgracia los tres temas están vinculados con el deterioro del tejido social, la falta de oportunidades, y la innegable repetición del círculo vicioso de pobreza, política asistencialistas, y corrupción. El tema de la pobreza, lo reconozco, es complejo hasta para la presentación de resultados que a la vista del gobierno federal se percibe una actitud triunfalista y mediáticamente, así lo han presentado.
Pero para alrededor de 54 millones de personas en esta situación sencillamente es algo que solo padecen y en la que no han tenido respuesta.
Señala usted, señora secretaria, que con la Cruzada Nacional contra el Hambre hoy de los más de siete millones de población objetivo, tres millones ya comen mejor, pero lamento informarle que otros 30 millones con esta política económica impuesta por el gobierno federal ya empiezan a padecer hambre, el saldo, por supuesto, no es nada favorable.
Lo acaba usted también de mencionar en su intervención inicial, para que la política social funcione se requiere mayor crecimiento económico, mejores ingresos y mejor distribución del gasto público, en suma, que ambas políticas caminen juntas, así lo dijo usted.
Desafortunadamente para los mexicanos las dos políticas están caminando por rumbos separados, y también con extrema lentitud. Tengo tres cuestionamientos señora Secretaria que tienen que ver con reglas de operación: mecanismos para la toma de decisiones, la transparencia y el lucro electoral.
Con eso que el gobierno ya reconoce lamentablemente como cuestión cultural llamada corrupción.
Ustedes plantean que la decisión sobre el uso y destino de los recursos recae en la propia comunidad, según sus demandas, es más, acaba usted también de mencionar que con esta nueva política social, que es federalista, y a reserva que lo podamos debatir en la próxima visita del Presidente de la República al Senado en ese mismo tema, quiero decirle que quizás vivamos en dos Méxicos distintos, hoy las reglas de operación funcionan de manera contradictoria a los dichos públicos.
Le pongo un ejemplo: existen comunidades que optaron por electrificar, sencillamente porque carecen de alumbrado público, pero como el rubro de alumbrado público no entra en electrificación, según algunos funcionarios de SEDESOL, concretamente delegados federales, a los municipios, a los alcaldes se les limita el recurso; quizá valdría la pena, señora Secretaria, que platicara directamente con alcaldes de Oaxaca, de Tlaxcala, de Chiapas, de Veracruz, que se encuentran atados de manos por los porcentajes establecidos en algunos programas para rubros prioritarios.
Por eso le pregunto ¿cómo atender las decisiones comunitarias con una normatividad que condiciona la atención básica, son los alcaldes, los presidentes y agentes de comunidades los que conocen sus necesidades, una decisión cupular, sin conocimiento no puede estar por encima de las carencias de los mexicanos?
El segundo punto que quiero tratarle es relativo a la transferencia y rendición de cuentas, es preocupante porque son insuficientes los mecanismos para evitar la desviación de recursos, pero es más indignante la falta de voluntad de los distintos órdenes de gobierno para dar información sobre el ejercicio de recursos públicos para el desarrollo social, y lo más importante sobre sus resultados, es parte de lo que le decía, el círculo vicioso, opacidad, corrupción e impunidad que nada contribuye al desarrollo integral de los grupos vulnerables en todo el país, sea en áreas urbanas o rurales, con las niñas o los niños en condición de calle, o con las jóvenes que deciden abandonar sus estudios ante la tentadora oferta de un bienestar efímero que ofrece la delincuencia organizada, y las enganchan para ser parte del narcotráfico o trata de personas, en otras, sea con los adultos mayores, que olvidados a su suerte aceptan también las migajas económicas que simulan bienestar.
Por eso le pregunto, ¿en la dependencia a su cargo, señora Secretaria existe la voluntad y el propósito para hacer llegar los recursos para lo que están destinados? Hoy varios de esos recursos, como el caso concreto de Coahuila tienen que ser solicitados a través del amparo de la justicia federal, varios de esos amparos interpuestos por compañeros y compañeras para que no les quiten el Programa Oportunidades.
Hace un año, usted se comprometió a actuar de manera inmediata ante las denuncias que existen sobre el manejo electoral, remover al responsable no es desmontar la estructura y mucho menos acabar con el problema, muchos delegados están utilizando esa condición de delegados para utilizar electoralmente cada programa, cada paso que da la Secretaría de Desarrollo Social, por eso le pregunto ¿antes de que arranque el año electoral, a unos cuantos días cómo detectará a los funcionarios públicos que aun lucran electoralmente, cómo se van a desmontar esas estructuras vinculadas a partidos políticos ante el evidente nombramiento de delegados, no federales, sino delegados electorales? Atenta estaré a sus respuestas, señora Secretaria.
RÉPLICA
Primero le agradezco a mi compañera que me permita responder, porque si no hubiera quedado esta participación inconclusa. Y como después de las reformas grandes, estructurales, este Senado está como medio dormido, pues a mí me da muchísimo gusto responder a este tema en el debate.
Y comentarle, señora secretaria, que tiene usted razón en el cambio de las reglas de operación, porque siempre tiene que haber un cambio en reglas de operación. Pero estamos hablando de dos cosas y conceptos que empezaría primero por capacitar a los propios delegados y funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Social.
Ustedes han hecho cambios diciendo que en las administraciones pasadas no se hacía absolutamente nada o por lo menos había opacidad.
Yo quiero decirle que muchos de sus delegados no conocen que electrificación también incluye alumbrado público. Por lo menos en los indicadores del INEGI.
Y en ese tema varios de los alcaldes no han podido implementar esos recursos en electrificación o alumbrado público, que contribuyen además a una política que su propio gobierno o que el propio gobierno federal está estableciendo como el combate a la inseguridad.
Y eso es fundamental, me parece que valdría la pena revisar si sus delegados están cumpliendo con toda oportunidad las instrucciones que se están dando desde la dependencia desde su secretaría.
Eso sería por un tema.
Por el otro tema, yo le planteaba en el inicio de mi discurso, no tiene que ver, señora secretaria, con la destitución sólo de personajes o de delegados, tiene que ver con un blindaje desde las estructuras internas, tiene que ver con un blindaje sobre las cosas que se están haciendo. Y sé que habrá aquí incluso senadores que saldarán a la defensa de otros partidos políticos diciendo que anteriormente no se hacían las cosas.
Bueno, ustedes se comprometieron a hacerlas hoy distinto. Ustedes están en un compromiso a ejemplificar, a mejorar, a eficientar, todos estos procedimientos.
La destitución de ningún funcionario acaba de raíz con los procesos de corrupción y mucho menos con los manejos electorales que se están generando en los estados y en los municipios.
Le puedo poner ejemplos también de asuntos de vivienda, por ejemplo.
De asuntos de las viviendas que están siendo condicionadas a cambio de ciertas cantidades económicas, ya sea para los delegados o para la vinculación de estos delegados. Le haré llegar con toda oportunidad esos datos, esas cifras, para que usted tome cartas en el asunto.
Y coincido con la senadora Lorena Cuéllar, vale la pena que en una comparecencia de esta naturaleza podamos establecer un mecanismo mucho más claro de rendición de cuentas, mucho más en un diálogo y en un debate entre el Senado de la República y el gobierno federal, que en una simulación política respecto de discursos o posiciones en los que unos defienden y otros planteamos nuestros puntos de vista.
Gracias, señora secretaria, por su presencia.