- Política
Sin considerar su enorme impopularidad que lo tiene como el peor mandatario en el país a pesar de que no hay circunstancias del crimen organizado propiciado por el narco en Tlaxcala, Mariano acude a evento partidista organizado por la CNOP para apoyar a la aspirante a diputada federal por el distrito con cabecera en Tlaxcala, Anabel Alvarado Varela a quien le da “el beso de la muerte” al dejarse ver con ella y mostrar que sería su carta para el mencionado distrito.
En el evento de la CNOP que se percibió como un destape anticipado de la dirigente de esta organización, Anabel Alvarado, acudió el primer priista del estado para demostrar su apoyo para que la joven sea la candidata ante acarreados que acudieron a regañadientes por la mala imagen que tiene el gobernador y que será una pesada loza para la aspirante a diputada federal.
Una vez que fue entrevistada, Alvarado Varela dijo que será el CEN del PRI quien designe a quienes representarán a su partido en los distritos y que se realizará por medio de una comisión electiva en la que participan 7 integrantes liderados por José Antonio González Fernández, por lo que descartó ser un hecho que ella sea la candidata.
La llamada ahijada de Mariano comentó que se han fortalecido las estructuras de la CNOP en el estado y se han reestructurado para incluir a cuadros jóvenes y mujeres pero al mismo tiempo con gente de probada experiencia que aportará mucho para el partido en los tiempos electorales que están en puerta.
Sin recordar que el gobernador en su momento pensó en emigrar a otro partido y desconocer su militancia al inicio de su administración, Alvarado Varela dijo que Mariano no incidirá en su favor, ya que él apoya a todos y debe ser la gente quien elija a quienes representarán al partido en las elecciones próximas.
El evento de fin de año de los cenopistas habría sido para medir la fuerza de la aspirante a diputada federal, convivió al que acudieron priistas del todo el estado, destacando personajes de la administración públicas, representantes populares y cuadros del partido, siendo lo más emblemático la presencia del gobernador que fue llamado por algunos priistas “ave de mal agüero” por el rechazo de la gente a su gobierno austero con la gente y complaciente con los bolsillos de algunos.