• Educación
  • Juan Vázquez
Docentes desquiciaron la vialidad por varias horas y encontraron ofertas para adquirir autos nuevos, comida, ropa, teléfonos y casas.

Tlaxcala, Tlax., a 14 de julio de 2015.- Una concentración masiva del magisterio se registró este día en la Unidad de Servicios Educativos de Tlaxcala (USET), donde se llevó a cabo el pago de la nómina  a miles de docentes al finalizar el ciclo escolar 2014-2015, situación que generó al mismo tiempo, la ocupación de espacios para la promoción y venta de todo tipo de artículos, comida, ropa y vehículos, así como el entorpecimiento del tráfico vehicular, principalmente.

Desde las primeras horas de este martes, cientos de maestros de todos los niveles educativos hicieron fila en las ventanillas para recibir su cheque anticipado por cuatro quincenas; lo que  por instantes generó algunos “cuellos de botella” para ingresar a través del principal acceso  vehicular.

Sin proporcionar mayores datos, integrantes del área de Comunicación Social de la dependencia, refirieron que de manera paralela al interior de las oficinas se celebraba una reunión privada entre el titular de la dependencia, Tomás Munive Osorno e integrantes de la Sección 31 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), encabezados por su dirigente en Tlaxcala, Demetrio Rivas Corona.

Dicha masificación permitió también que la zona de estacionamientos se convirtiera, prácticamente en un verdadero tianguis de productos, donde incluso hicieron su agosto  los clásicos “viene, viene” y dueños de puestos de comida.

Durante todo el día y parte de la tarde, los vendedores que se concentraron sobre el perímetro del estacionamiento exterior donde  intensificaron sus ventas, mientras otros promocionaban bienes y servicios.

Todos con su correspondiente “entre”, ya que sin proporcionar información a detalle, uno de los responsables del stand con vehículos, aceptó que tenían el permiso a cambio de un apoyo “simbólico” por parte de uno de los funcionarios educativos.

De la misma forma y siguiendo el mismo procedimiento, fue posible observar un corredor de vendedores de comida semifijos,  promotores de compañías telefónicas, seguros de vida, hasta inmobiliarias.

La mayoría quienes ofrecían alimentos: aguas frescas, tortas, tacos, tamales, refrescos, etcétera.
Mientras tanto, la vialidad se desquició por varias horas, desde el entronque con la prolongación Independencia hasta el estacionamiento principal.