• Tlaxcala
  • Xico Corona
La entidad es una de las pocas en donde todavía existen delitos contra el honor que inhiben el ejercicio de la libertad de expresión.

El pasado fin de semana fue hallado sin vida el cuerpo del fotoperiodista Rubén Espinosa Becerril quien se autoexilió por haber recibido amenazas en el estado de Veracruz en donde se especializaba en la cobertura de protestas sociales, mientras que en Tlaxcala sigue siendo uno de los pocos estados en donde todavía existen delitos contra el honor que inhiben el ejercicio de la libertad de expresión y es el segundo estado con más denuncias contra periodistas, incluso el director de un medio fue privado de su libertad en 2013.

Rubén Espinosa dejó Veracruz por amenazas desde el pasado mes incluso dijo “todo el mundo es atacado cuando tu crítica es al mal gobierno que lleva Javier Duarte, y me tuve que venir en un contexto de violencia que se vive contra los comunicadores en Veracruz. Estando acá, dando algunas entrevistas, me entero que matan al (periodista) número 13, asesinado por este mal gobierno”, comentario dicho el pasado 9 de julio.

En el caso de Tlaxcala la libertad de expresión es acotada porque dentro del marco legal existen delitos contra el honor que permiten que funcionarios utilicen esta situación para denunciar y hasta criminalizar a periodistas tal y como ocurrió en 2013 con el director de e- consulta Tlaxcala, Martín Ruíz quien fue detenido por haber llamado a un funcionario estatal “viejito maniatado”, “mediocre” y en otra por pronunciar un “discurso estrambótico a favor de Mariano González Zarur” –gobernador de la entidad-."

Tan sólo en el estado existen 5 denuncias en contra de periodistas hasta enero de este año, de acuerdo con lo publicado por la organización Artículo 19, sólo rebasado por el Distrito Federal en donde existen 9 denuncias a pesar de que en la capital del país fueron derogados los delitos contra el honor.

Artículo 19 refiere que a la fecha van 88 periodistas asesinados en México, lo que lo convierte en uno de los países más peligrosos para el ejercicio del periodismo y la libertad de expresión, mientras que en Tlaxcala es uno de los estados en donde más se les criminaliza según los datos antes mencionados.

Incluso la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en 2010 vio satisfactoriamente cumplimiento de las recomendaciones en relación a la despenalización de los delitos contra el honor en algunos estados y a nivel federal, sin embargo, mantiene su preocupación por la falta de despenalización en algunos otros estados, un caso concreto es el de Tlaxcala.

Mientras tanto se ha sumado una muerte más que deja las dudas sobre si fue la actividad que incomodó a alguien lo que llevó a Rubén Espinosa a ser asesinado, dejando en evidencia que el Distrito Federal ya no es un lugar seguro para quienes decidan exiliarse por recibir amenazas producto de sus actividades periodísticas.

 

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