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Con un marcado resentimiento, regresó a la vida pública la ex candidata del PAN a la Gubernatura Adriana Dávila Fernández luego de haber desparecido un par de meses tras la derrota sufrida en las urnas y arremete contra su ex aliado el PRI, panistas, candidatos de otros partidos políticos y hasta medios de comunicación a quienes culpó de su reciente derrota, asegura que no está muerta políticamente como quisieran verla sus detractores.
Ya semi repuesta de la pasada contienda tras perder por segunda ocasión consecutiva la Gubernatura y acompañada de su sequito, la ex diputada federal justificó su silenció el cual rompió y encueró a varios de sus detractores; “decidí guardar silencio…cuando uno habla con el hígado caliente solo saca basura de la boca”.
En entrevista colectiva, la senadora panista arremetió en contra de todos los que en ese momento le llegaron a la mente, coincidentemente varios de ellos fueron acusados de traidores y se les sigue un proceso de expulsión de las filas del PAN.
Desde la operación política del Gobernador de Puebla Rafael Moreno Valle, así como las infidelidades del ex dirigente del PAN Sergio González Hernández mismas que fueron ventiladas en redes sociales así como los escándalos de los moches protagonizados por la ex Diputada Federal Aurora Aguilar Rodríguez hacía alcaldes tlaxcaltecas fueron condicionantes de su pasada derrota.
A lo anterior, sumó a la Jueza Claudia Pérez Rodríguez, a quien acusó de presionar con expedientes en mano a panistas para operar en su contra; “una corrupción terrible de quien en su momento fue Juez, quien con expedientes en mano presionaba a militantes o a ciudadanos a quienes presionaba o vienes a tal o cual lugar o te vas a la cárcel”.
Incluso se le fue a la yugular a los alcaldes que no son de su grupo político como la de Nanacamilpa Lilia Olvera Coronel y de Huamantla Alejandro Aguilar López, del que señaló que el escándalo de su hijo del ex diputado local contribuyó para que le mermara en las preferencias electorales; “lidie con los escándalos del hijo de Alejandro Aguilar en Huamantla por haber golpeado a un policía”.
En el caso de Nanacamilpa, dijo los excesos de algunos servidores públicos coadyuvaron para que la ciudadanía emitiera una mala calificación hacía los ayuntamientos, lo cual también fue condicionante para perder en las urnas; “todo mundo reclamaba…un gobierno muy mal calificado donde el secretario del Ayuntamiento golpeaba a todo mundo”.
Dávila Fernández también arremetió en contra de los gobiernos de Mariano González Zarur y del Presidente Peña Nieto, al asegurar que han sido las peores administraciones; ”…el peor gobierno que ha tenido la historia a nivel nacional con Peña Nieto y a nivel local existe la misma escuela”.
La temperamental e impulsiva panista, dijo que cambió el estilo de hacer las cosas y dejar la critica a un lado, de ahí que su actitud hoy día es más proactiva ya que incluso dejó de ser pleitonera; “el país está todo el tiempo en pleito y por eso no avanzamos”.
Luego de estar como espectadora del primer informe que presentó la ex perredista hoy panista Minerva Hernández Ramos, la senadora dijo que estará muy pendiente de la renovación de la dirigencia estatal panista por lo que mandó el mensaje a sus detractores a quienes les dijo que no la den por muerta.
“Quienes piensen que no voy a participar en un partido al que pertenezco desde hace 22 años están muy equivocados claro que voy a participar…solo puedo desearles bendiciones ojala que encuentren paz que bueno que siempre me tengan en su mente yo no los tengo en la mía”, sentenció.
Con marcado temor no obstante de su fuero, la senadora evitó ponerle nombre a sus críticos a quienes una vez más arremetió en su contra; “…que siguen sacando notas…es la única forma que tienen de expresarse…ojala eso les de paz y tranquilidad a su alma”.
Incluso la panista la hizo de gurú al recomendarle a todos aquellos panistas que quieren una limpia en el PAN y arrebatarle el control; “…ojala que todo lo que hacen y señalan de mi parte les ayude a calmar un poquito sus rencores sus frustraciones y de paz y tranquilidad a su alma porque andan muy inquietos, todos andan ligeramente aceleraditos, pobrecitos que se hagan una limpiecita y que se sientan más tranquilas y que Dios los bendiga”.