- Seguridad
Datos obtenidos por econsulta revelaron que dos de los tres detenidos este lunes tras un robo frustrado en el centro de la capital del estado, habrían sido protegidos por elementos policíacos luego de que tuvieran conocimiento de que uno de ellos era hijo de un alto mando de la dirección de Seguridad Pública del municipio y el otro es vástago de un ex policía estatal que tuvo cargo de comandante.
Uno de los policías que estuvo en el operativo para la detención de los presuntos hampones fue precisamente el papá de uno de ellos de nombre Martín T. quien forma parte de la policía municipal de Tlaxcala y se presume que presenció el aseguramiento de uno de los amigos de su hijo.
Todo surgió a raíz de que uno de los delincuentes dijo al interior de la miscelánea que pretendían robar, que era hijo de un comandante de la policía, por lo que la actitud de los uniformados hacía los jóvenes cambió de manera inmediata y se les otorgó otro trato que incluso fue cuestionada por los mismo pobladores que se encontraban enardecidos en contra de los asaltantes.
Martin T. supuesto progenitor de Marco T. trabaja como encargado de turno en la policía capitalina, mientras que Francisco A. se desempeñaba como comisario de la policía estatal anteriormente y es papá de Aurelio A, otro de los detenidos.
La presunta relación de compadrazgo y complicidad sería la que habría orillado a que les dieran otro trato a los hampones, al grado de evitar el linchamiento por la multitud enardecida, hecho que fue criticado a través de las redes sociales por el evidente encubrimiento de los uniformados hacía los jóvenes.
El detenido en la tienda sería el hijo del ex comandante de la policía estatal, en tanto que el sujeto que quiso escapar luego de haber robado un negocio de Herbalife se presume es el vástago del policía municipal.
No es la primera ocasión en la que policías o familiares se encuentran involucrados en hechos delictivos, un caso es el de los policías acreditables que fungían como guardias personales del ex gobernador Mariano González Zarur y que asesinaron a un joven aprovechando el fuero que les otorga el ostentarse como servidores públicos.
El cuestionamiento en redes sociales resultaría cierto y evidenciaría que hubo un encubrimiento aun cuando en el momento de los hechos los enardecidos pobladores desconocían que existían una presunta complicidad entre los uniformados y los jóvenes amantes de lo ajeno.