- Política
Luego de que el grupo de “los chuchos” del Partido de la Revolución Democrática (PRD) sacrificaran al ex dirigente estatal del Sol Azteca en Tlaxcala, Manuel Cambrón Soria y lo bajaran de la lista de candidatos a diputados federales por la vía de representación proporcional, sólo quedan tres tlaxcaltecas que aspiran a ser plurinominales por la cuarta circunscripción, dos de ellos del Partido Acción Nacional (PAN) y otra del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Fue ayer que le avisaron a Manuel Cambrón que a pesar de haber sido el principal operador de “los chuchos” para vender la causa perredista en 2016, estaba fuera de la lista plurinominal y que tendría que regresar a la dirigencia del PRD para encabezar el proceso electoral federal y local que se vivirá en Tlaxcala.
Fue ese mismo grupo el que invitó voluntariamente a la fuerza a Minerva Hernández Ramos a ceder su candidatura para sumarse en 2010 a la panista Adriana Dávila Fernández pese a que la perredista era la más posicionada; para 2016 esa tribu a la que pertenece Manuel Cambrón fue la señalada por Lorena Cuéllar de ser la que vendió las actas al partido en el poder para no reclamar el triunfo de la senadora.
Tras el descalabro a Manuel Cambrón, siguen vivas las aspiraciones de los panistas Carlos Carreón Mejía para lograr una curul en San Lázaro y de su antigua patrona, la senadora Adriana Dávila Fernández, quien se ha caracterizado por tener puestos por la vía plurinominal o sin alcanzarlos por el voto de la ciudadanía.
Además de los dos panistas, Beatriz Paredes Rangel se encuentra dentro de la lista por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y seguramente llegara a la Cámara Baja debido a que será la coordinadora de la campaña del prianista José Antonio Meade en la cuarta circunscripción, siendo de los tres aspirantes de Tlaxcala la que más posibilidades tiene de estar en la próxima legislatura federal.