- Tlaxcala
Han pasado 27 días desde que los papás de dos menores de edad observaron la grabación y se percataron que la niñera de sus gemelos, Elisa N. había agredido físicamente a sus hijos, desde ese momento decidieron actuar sin imaginar las consecuencias que generaría el error de la joven de 25 años de edad.
El 1 de marzo, un día después de que los papás de los menores agredidos echaron un vistazo los videos de las cámaras de seguridad instaladas en su domicilio ubicado en el municipio de Yauhquemehcan, habrían tomado justicia por su propia mano y se desquitarían de la niñera, según contó a este medio el papá de Elisa N.
La supuesta golpiza que sufrió la joven de 25 años de edad de acuerdo a la versión de su padre, no sería suficiente, ya que en el transcurso de la semana los familiares de los menores agredidos decidieron subir a las redes sociales los videos en los que la niñera maltrata a los gemelos.
Ya en las redes sociales, los internautas se encargaron de que Elisa N., muriera por primera vez, su error le costó señalamientos, amenazas y el estigma de ser una mujer abusadora de infantes, lo que terminó con su corta vida a nivel social e incluso familiar.
El linchamiento mediático fue acompañado de una carpeta de investigación que inició la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), luego de que el titular de la dependencia, Aarón Pérez Carro afirmara que no tolerarían ese tipo de conductas en Tlaxcala.
Extraoficialmente se sabe que Elisa N., fu ubicada y detenida por elementos de la policía de investigación en Apizaco el 19 de marzo, sin embargo, su detención se daría a conocer un día después.
Para el día 20 de marzo se preparó todo el show mediático que pondría a la PGJE como una fiscalía que actúa de manera pronta y expedita, noticia que dio vuelta al país e incluso a nivel internacional se aplaudía la prontitud con la que actuó la dependencia para capturar a la peligrosa niñera.
Unas horas más tarde ya en el día del natalicio de Benito Juárez, el gobernador del estado Marco Mena Rodríguez; el secretario de gobierno, Tito Cervantes Zepeda y el procurador, Aarón Pérez Carro, tuvieron que guardar las efemérides al “Benemérito de las Américas”, dejar para otra ocasión el festejo de la primavera y llenarse de energía en Cacaxtla y Xochitecatl para enfrentar el supuesto suicidio de Elisa N.
Según la versión oficial fue alrededor de las 07:00 horas del 21 de marzo que el cuerpo de la niñera fue encontrado sin vida por aparente asfixia mecánica, hecho que lo dieron a conocer cinco horas después de que se percataron del deceso de la joven.
Al interior de la corporación se habla de que durante cuatro horas, no se les permitió el ingreso a los peritos del Servicio Médico Forense, por lo que surgieron las sospechas de que podrían haber alterado la escena de los hechos.
Las dudas a la población acrecentaron cuando el padre de Elisa N., afirmó que el cuerpo de su hija tenía un golpe a la altura de la cabeza y que una mujer supuestamente habló de parte del procurador y le condicionó pagar todos los gastos funerarios si aceptaba la incineración del cuerpo de la niñera, con lo que se borraría cualquier otra evidencia que apuntalara a algo diferente al suicidio.
Han pasado cinco días desde su deceso y los padres de Elisa N., ahora son quienes exigen justicia y lamentan el actuar de su hija, hecho que le arrebató la vida poco a poco, llevándola a dos muertes, la primera cuando se le vino el mundo encima en las redes sociales y la segunda cuando tuvo un trágico final en el Cereso de Apizaco.
Mientras tanto, las autoridades estatales no han dado explicación del porqué no se actuó de manera diferente y se adoptaron otro tipo de protocolos derivado de las amenazas contra la niñera y el linchamiento social que existía hacia Elisa N.
Peor aún ha sido el silencio del comisionado de Seguridad Pública, Hervé Hurtado Ruiz, quien a diferencia del procurador Aarón Pérez Carro, hasta el momento no ha dado la cara, aun cuando el lugar en el que suicidó Elisa N. está a su cargo.