- Tlaxcala
Ante la inminencia del arribo del gobierno de la cuarta transformación del país, delegados federales ya preparan sus tiliches para irse entre diversas anomalías como la renta de una computadora personal en un millón de pesos, según lo revelaron algunas auditorías practicadas a las delegaciones, siendo Mariana González Foullón y Perla López Loyo las más cuestionadas por no haber cumplido con la encomienda por la que fueron impuestas.
Sólo cinco días le quedan a quienes con enormes salarios y personal a su servicio fueron parte del régimen que fue rechazado en las urnas el pasado 1 de julio, dando pasó así al primer gobierno emanado de la izquierda en la historia moderna del país, el cual se comprometió a frenar la corrupción y acabar con los excesos en este caso de los delegados federales.
Será a partir del sábado que llegue la súper delegada, Lorena Cuéllar Cisneros para ostentar la representación de las 46 delegaciones que desaparecerán con ese nombre y se conjuntarán para estar bajo el mando de la ex senadora, quien habrá de coordinar todos los trabajos del gobierno federal en la entidad al lado de coordinadores de las diferentes áreas que tendrá para agilizar las labores correspondientes.
Derivado de la llegada de la súper delegada, ya ha habido reuniones con sindicatos y personal de las delegaciones, quienes se comprometieron a trabajar conjuntamente para responder a las expectativas del próximo presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
Lorena Cuéllar por su parte, se comprometió a no tolerar la corrupción en las áreas que aun componen las delegaciones federales y aseguró que seguirá la línea del tabasqueño para no permitir que se cometa un solo acto corrupto, por lo que se aplicará todo el peso de la ley a quien pretenda llevar a cabo alguna situación de este tipo.
Y es que dentro de las diversas anomalías que han arrojado las auditorias que se han practicado a las delegaciones federales, se encontró que incluso se llegó a rentar una computadora por un millón de pesos, hecho que muestra la grave descomposición que existe al interior del moribundo gobierno priísta.