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El nombramiento del pediatra, Daniel Romero López como el dirigente del Sindicato de Trabajadores del Sistema Nacional de Salud (Stsns) en Tlaxcala, es el comienzo del fin de la era del sindicalismo priísta en Tlaxcala, esto luego de que el líder de la Confederación Internacional de Trabajadores (CIT), Napoleón Gómez Urrutia anunciara que la agrupación que aglutina a diferentes sindicatos ya cuenta con más de 550 mil agremiados en todo el país.
Fue Romero López quién en una conferencia de prensa después de su nombramiento al frente del nuevo sindicato, argumentó que en el caso de Tlaxcala ya se tienen 800 agremiados solo al Stsns, mientras que el propio Gómez Urrutia sostuvo que de los diferentes sindicatos que hay, ya cuentan con mil 200 afiliados.
El también líder del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Siderúrgicos de México (SNTMMS), lanzó un balde de agua fría para el sindicalismo tradicional que es afín al Partido Revolucionario Institucional (PRI), al asegurar que se deben adaptar a los cambios y que la ley ya los alcanzó, por lo que ahora tienen un año para llamar a elecciones y que el voto tiene que ser libre.
Aunque Gómez Urrutia no dijo abiertamente que la CIT tiene el respaldo del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), si se pronunció al igual que Romero López en favor de las acciones implementadas por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
Esto además de la presencial de senadores, diputados federales y diputados locales de la coalición "Juntos Haremos Historia", siendo al menos ocho legisladores federales y media docena de locales, los que estuvieron presentes en la toma de protesta de Daniel Romero como dirigente del nuevo sindicato de la Secretaría de Salud (SESA).
La mazorca se irá desgranando conforme pasen los meses y el sindicalismo de la 4T vaya avanzando en Tlaxcala con Daniel Romero y a nivel nacional de la mano de Napoleón Gómez Urrutia.
Y es que el tamaño del evento del día de ayer y las figuras que se congregaron en torno a Daniel Romero es una muestra del respaldo que tiene del sindicalismo y de los legisladores federales y locales afines a MORENA, además de contar de manera indudable con el apoyo del gobierno federal de la 4T.