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En ridículo quedaron los 10 consejeros estatales que con trampas habían ganado la elección en la asamblea del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) que se llevó a cabo en el segundo distrito electoral federal, luego de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) reconociera el “cochinero” organizado por el “lilio”, Leonardo Cruz Meléndez para favorecer al grupo lujanista en Tlaxcala.
EL máximo tribunal en materia electoral sentenció que hubo una evidente manipulación del padrón de afiliados de MORENA por parte de quienes manejaron las asambleas y tienen en su poder las estructuras del partido, esto con la finalidad de ir en contra del grupo del presidente, Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
Con esto, le dieron revés a Lucía Diana Méndez que tuvo 188 votos; Galdina Galicia, 139; Yuliana Águila, 109; Mariana Cruz Felipe, 85 y Carmen Armas, 79. En los hombres, Agustín Ramos con 185 votos; Leonardo Cruz, 143; Marco Antonio Castillo, 86; Jaír Castillo, 77 y Moisés Lima, 71.
Cabe señalar que Leonardo Cruz fue juez y parte, ya que mientras fungía como secretario de Organización de MORENA, fue el encargado de coordinar las asambleas y casualmente resultó electo como consejero con 143 votos en una elección en la que el TEPJF ya reconoció que se rasuro el padrón de militantes.
El caso de Leonardo Cruz se vuelve más interesante si se considera que fue el coordinador de campaña de Ana Lilia Rivera en el pasado proceso electoral, lo que deja de manifiesto una complicidad para excluir a todo morenista que no fuera por el proyecto de Bertha Luján a nivel nacional y en el plano estatal con su patrona la senadora y el senador suplente, Joel Molina Ramírez.
Es de risa que mientras AMLO ganó la elección de 2018 con más de 400 mil votos en Tlaxcala, un consejero de MORENA apenas pueda tener 71 votos, lo evidencia lo cerrado que quieren hacer este partido para unos cuantos,