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El exgobernador Alfonso Sánchez Anaya (ASA) y su esposa María del Carmen Ramírez García, ambos funcionarios del gobierno federal, olvidaron la austeridad republicana auspiciada por su jefe, el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y decidieron pasar de lujo las fiestas decembrinas Las Vegas Nevada, mostrando así que la tan nombrada austeridad no aplica para quienes viven del erario público y amasaron una fortuna en su paso por la gubernatura.
A través de las redes sociales, el matrimonio que gobernó Tlaxcala y que intentó eternizarse en el poder, mostró imágenes en las que aparecen al lado de otra pareja en un viaje que realizaron a los Estados Unidos de América.
Ambos personajes que fungieron como gobernador y primera dama de Tlaxcala, ahora son empleados del gobierno de la Cuarta Transformación del País con un salario de 122 mil 512 pesos mensuales para la autollamada “Hilaria tlaxcalteca” y de 144 mil 564 pesos para quién fue el gobernador de la llamada alternancia en Tlaxcala.
Ramírez García desempeña un cargo de menor importancia dentro de la Secretaría de Gobernación (Segob) en la Coordinación de Atención Integral a la Frontera Sur, mientras que su cónyuge tiene una dirección dentro de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del gobierno de México.
Esta pareja se dio a conocer por el intentó de Alfonso Sánchez de dejar como gobernadora a su esposa, lo que le valió críticas incluso al interior de su partido, sin embargo, a pesar de haberla hecho candidata del Partido de la Revolución Democrática (PRD), no pudo conquistar la simpatía de los tlaxcaltecas.
Incluso la misma María del Carmen se comparó en ese entonces con la esposa del entonces presidente de los Estados Unidos de América, Hillary Clinton por ser la primera dama que pasó a ser senadora, autonombrándose la “Hilaria tlaxcalteca”, hecho que en la actualidad le hubiera significado ser la protagonista de memes y burlas.