• Política
  • Emilio Piedras
En Apizaco los militantes se quejan porque no pueden emitir su voto ante el reducido número de urnas instaladas.

Desorganizado y con graves problemas de operación inició el proceso interno de Morena para elegir 30 consejeros nacionales, pues mientras en algunos centros de votación están vacíos como es el instalado en Zacatelco, en otros como el de Apizaco hay largas filas y los militantes tardan mucho tiempo para poder emitir su sufragio.

En Tlaxcala se instalaron seis centros de votación, dos por cada distrito electoral federal, en los que se distribuyeron 54 mil boletas. Sin embargo, la mala organización del proceso está dejando mal parada a la dirigencia nacional de ese partido porque no hay garantías de que todos los simpatizantes voten y se garantice un piso parejo.

Los centros de votación en el distrito uno se instalaron en Apizaco y Huamantla, en el distrito dos las casillas están en Tlaxcala y Zacatelco, mientras que en el distrito tres las urnas se ubicaron en Zacatelco e Ixtacuixtla.

Militantes de Morena del municipio de Apizaco se han quejado no sólo del burdo acarreo y de la compra de votos que están llevando aspirantes a consejeros como el Oficial Mayor de Gobierno, Ramiro Vivanco Chedraui y la jefa de adquisiciones de la Oficialía Mayor de Gobierno, Oded Pérez García, sino de la preferencia para que ciertos simpatizantes puedan sufragar primero.

Aunque los centros de votación empezaron a funcionar a las nueve de la mañana de este día, la realidad es que en algunos el trámite está lento, situación que ya ha generado la molestia de los militantes que lamentan la falta de capacidad para organizar un proceso interno que está resultando todo un fiasco.

Los 30 consejeros que resulten electos serán los encargados de organizar la asamblea estatal en la que será designada la nueva dirigencia estatal de Morena en Tlaxcala.

Tags: