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  • Rosa Ma. Velázquez
Mediante el tipo de sangre del infante, el supuesto padre de la criatura se dio cuenta de lo que había pasado

Buenos Aires, Argentina: Una ciudadana dio a luz a un bebé que no era suyo, luego de que en un centro de medicina reproductiva se le implantara por error otro embrión en un tratamiento de fertilización.

Cuando estaba por dejar la clínica, el padre del bebé notó que el grupo sanguíneo no correspondía con los de él y su esposa; genéticamente, si el registro era correcto, el pequeño no sería su hijo.

Para erradicar cualquier duda, la pareja volvió a realizarse los análisis de sangre y se confirmó el primer resultado; posteriormente, un médico de la localidad de San Isidro, donde residen, les recomendó un estudio de ADN que volvió a ratificar la incompatibilidad.

La sospecha desde el primer momento fue que en la clínica de fertilidad, se le había transferido a la mujer el embrión de otra pareja por error.

Dada la gravedad del asunto, decidieron poner una denuncia y la justicia abrió una investigación; se determinó que efectivamente la clínica transfirió otro embrión a la mujer.

Según el descargo de la institución, el embrión de la pareja no resultó apto para ser implantado, por ello, precisaron, el óvulo que dio origen al embrión habría sido donado; resta determinar quién es el padre biológico entre un reducido grupo de clientes del centro de fertilidad.

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