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Aunque falta más de un año para las elecciones federales y locales, el titular de la Secretaría de Infraestructura, Alfonso Sánchez García realiza lo que serían actos anticipados de campaña al promoverse como el candidato de la gobernadora, Lorena Cuéllar Cisneros al Senado de la República.
El hijo del exgobernador, Alfonso Sánchez Anaya asevera abiertamente ante la gente que es el ungido de la mandataria estatal y oferta todo tipo de programas sociales, tanto del ámbito federal como del estatal, de acuerdo con la versión de personas que han asistido a sus reuniones.
El funcionario estatal incluso, se sabe que estaría usando recursos públicos para su promoción personal, ya que varios de los que colaboran en su campaña, estarían cobrando en el gobierno loca y utilizarían hasta combustible de las dependencias.
Sánchez García aunque es muy torpe para entablar un discurso político al igual que su esposa, Marcela González Castillo, su argumento es que su papá ayudó a algunas personas, pensando que la capacidad y el talento se hereda por derecho divino.
Pese a sus limitantes, el sanchezanayismo se ha aventurado a mandar a un patiño como su carta a la senaduría para posteriormente cumplir el sueño virreinal de Alfonso papá de hacer que su familia gobierne Tlaxcala nuevamente.
Este grupo fue revivido por la gobernadora, quien ha sido blanco de críticas de esta organización que sólo asegura que es títere del verdadero patrón que aseguran que es el veterinario Sánchez Anaya.