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El junior metido a político, Alfonso Sánchez García, le surgió un repentino interés de informarle a los ciudadanos el trabajo que realiza desde la Secretaría de Infraestructuras.
Incluso en las redes sociales y de manera física se promovió la invitación bajo el objetivo de llenar el auditorio municipal de Totolac al medio día de este domingo 11 de junio, donde dará un informe de actividades.
Esto no se trata más que de un acto de proselitismo anticipado, ya que para nadie es nuevo que el hijo del ex gobernador, Alfonso Sánchez Anaya, quiero llegar al Senado de la República.
Su informe carece de lógica política y sustento legal, sobre todo porque será hasta el 30 de agosto cuando la actual administración cumple dos años en el poder, fecha que espera la mandataria Lorena Cuéllar Cisneros para rendir a los tlaxcaltecas lo hecho en 730 días de trabajo.
Y es que el acto de informar hace algunos meses no tenía importancia, sin embargo y ante la cercanía de los tiempos electorales, hay ambición por saludar de mano a tlaxcaltecas.
El proceder de ese bisoño funcionario estatal es incongruente, porque son varios los sectores que le han pedido información sobre los proyectos gubernamentales y es la fecha que no lo hace porque recurre a evasivas.