- Salud
Los estados de Puebla y Tlaxcala han demostrado una absoluta incapacidad para articular una estrategia que procure una mejora de condiciones a los habitantes de la cuenta del río Atoyac.
Así lo demuestran recientes estudios que evalúan una exagerada contaminación de sus aguas, pero también de los suelos y el aire en sus afluentes.
Entre las enfermedades presentes se encuentra cáncer, leucemia, insuficiencia renal, malformaciones congénitas y abortos espontáneos.
Esto como resultado de la presencia de los desechos de industrias automotrices, textiles, metalúrgicas y papeleras entre otros, que a ojos de todos descargan en el río sin mayor vigilancia ni consecuencias.
En las aguas del río se detecta la presencia de cromo, plomo, zinc, cadmio; así como agroquímicos, bencenos, toluenos y xilenos. Los municipios que el Atoyac atraviesa y dónde la población sufre mayor riesgo son: Tepetitla de Lardizábal, Nativitas, Tetlahuaca, Zacatelco, Xicohtzingo, Papalotla de Xicohténcatl y Tenancingo.