- Política
Como un rotundo fracaso se puede considerar el trabajo gris que Augusto Ramírez ha realizado desde que pisó tierras tlaxcaltecas, ya que no ha podido dar una en contención de crisis y manejo de medios de comunicación en la entidad. El hidalguense prefirió dedicarse a temas de índole personal y románticos, en lugar de trabajar para que la percepción ciudadana de la gobernadora continuara al alza.
Sin embargo, lejos de abonar a la imagen pública de la mandataria, lo único que hizo fue exhibir una actitud alejada de los medios de comunicación y sólo pocos tuvieron el “privilegio” de acercarse al personaje inflado de prepotencia sólo por ser recomendado de Alfonso Brito, ex vocero de Sánchez Anaya.
De ser coordinador de toda una maquinaria en materia de imagen, marketing, difusión y estrategia para informar a la ciudadanía, fue desplazado a encargado del área de comunicación social de la FGJ, donde no logra contener tampoco temas de seguridad.
Sin las comodidades de antes, ni el aparato que tenía en la Coordinación de Comunicación, Augusto Ramírez tampoco da el ancho, ya que vuelve a demostrar desconocimiento en un solo tema. Al parecer, sería la última oportunidad, que le ofrecieron por ser el recomendado de Alfonso Brito, si no da resultados quedaría como última opción una vocería de algún municipio, si es que algún presidente despistado le abre las puertas, tal vez es ahí donde debió comenzar para tomar práctica, porque lugar donde llega, lugar donde simplemente no la hace.