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  • Adolfo Tenahua Ramos
Ha demostrado que es peor que los otros que tanto criticaba en la campaña.

Cuando todos creyeron que la dinastía de - los Orea - estaba desaparecida, resucitaron entre los escombros y aparecieron junto al presidente de Apetatitlán, Azain Avalos, quien ha demostrado ser “un títere”. 

Y es que la hija del ex presidente de Zacatelco, Tomás Orea, la política primeriza y perdedora de todas las campañas Carlett Orea, logró venderle al munícipe la idea de hacerlo brillar como una estrella ante la sociedad. 

Esta última tiene un corporativo que le cobra miles de pesos para promocionarlo en las redes, siempre presumiendo sus ridículos dotes de gobernar, aunque en realidad ha demostrado todo lo contrario. 

Este supuesto corporativo está asociado a un diseñador gráfico de nombre Eduardo Villaseñor, que por cierto está en la nómina del Partido Alianza Ciudadana (PAC) y al mismo tiempo cobra en el ayuntamiento de Apetatitlán. 

Como quien dice hace que trabaja,- pero cobra muy bien-, lo que de plano no se le da, es que intenta ser el vocero del pésimo Ayuntamiento, pero creo que lo suyo es hacer dibujitos en la computadora. 

Eso de que le vendan espejos al presidente no es la idea porque lo hacen creer que la gente lo quiere, aunque en realidad la sociedad lo detesta y ya lo empezó a juzgarlo porque ha demostrado que es peor que los otros que tanto criticaba en la campaña.

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